Una pareja de mexicanos que llegó a Nueva Jersey hace 30 años fue deportada y dejó a sus tres hijos en Estados Unidos.
Oscar y Humberta Campos vivían en Bridgeton, Nueva Jersey, y son propietarios de una compañía de jardinería.
Se despidieron de sus hijos este viernes por la mañana en el aeropuerto de Newark y abordaron un vuelo con destino a la Ciudad de México.
Sus vástagos tienen 24, 22 y 16 años y son ciudadanos estadunidenses.
Asimismo, la pareja fue obligada a firmar un poder para que su hijo mayor pueda cuidar a su hermano menor, que cursa el segundo año de preparatoria, y hacerse cargo de la hipoteca de la casa.
No hay distancias. Siempre los llevaré en mi corazón”, declaró Oscar Campos a la televisora NBC Philadelphia.
Entre lágrimas y visiblemente compungidos trataron de calmar los ánimos de familiares y amigos.
El mexicano añadió que había huido de la violencia de Tamaulipas, su estado natal, y que cruzó la frontera hacia Texas en 1989.
Campos comentó en una entrevista previa con Telemundo62 que temía regresar al país debido a que cuando mataron a su padre a él lo secuestraron.
NBC informó que, tras un largo proceso para obtener visas de trabajo, los funcionarios federales de inmigración les ordenaron que abandonaran el país.