La producción de vehículos ligeros en el país reportó en junio una caída de 4.4 por ciento, siendo Mazda la que obtuvo el peor resultado, al registrar una disminución de 71.7 por ciento en sus ventas, revelaron cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Según el Inegi, Mazda produjo 5 mil 20 unidades durante junio, lo que contrasta con las 17 mil 739 de igual mes del año pasado.
Además de la fabricante japonesa, otras 4 de las 11 automotrices que operan en México, tuvieron caídas: Nissan cayó 22 por ciento, al pasar de 72 mil 799 a 56 mil 791 unidades; mientras que Audi bajó 17 por ciento, Toyota lo hizo 15.8 por ciento y FCA, 5.1 por ciento.
En el primer semestre de 2019 la producción total de vehículos en el país fue de un millón 979 mil 62 unidades, que comparado con el mismo periodo del año pasado representa un avance de 0.73 por ciento.
En exportación, el Inegi dio a conocer que en junio se mostró un avance de 1.69 por ciento, con 320 mil 470 unidades, comparado con las 315 mil 130 del mismo periodo del año pasado.
Mazda también reportó la baja más relevante en el rubro de exportación, con 66 por ciento; Audi tuvo una baja de 25, Nissan una de 21.6 y Toyota registró una disminución de 11.4 por ciento.
En el primer semestre del año el Inegi reportó que la industria automotriz exportó un millón 746 mil 813 unidades, lo que representó un crecimiento de 3.08 por ciento, comparado con el mismo periodo del año pasado.
Estados Unidos se mantiene como el principal destino de exportación, con 78.5 por ciento del total; seguido de Canadá, con 7.1 por ciento; Latinoamérica, 5.9 por ciento, y Europa, 6.4 por ciento.
SE PRENDEN LAS ALARMAS.
Tras 25 meses de cifras negativas en las ventas de vehículos ligeros nuevos en el país, la industria automotriz señaló que está en crisis y encendió alarmas para detener esta caída con incentivos fiscales, financiamiento y el freno a la importación de autos usados.
Con la caída en las ventas de 11.4 por ciento en junio y de 6.4 por ciento en el primer semestre, comparado con el mismo periodo del año pasado, Eduardo Solís, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), dijo que “hay que prender las alarmas porque necesitamos reactivar el mercado interno”.
