Porfirio Muñoz Ledo, presidente de la Cámara de Diputados, expresó su molestia ante sus compañeros legisladores con un «chinguen a su madre, qué manera de legislar».
El diputado soltó esta frase sin darse cuenta de que su micrófono seguía abierto mientras ocurría la votación en lo general del dictamen para reformar la Ley Orgánica del Congreso con la añadidura de última hora, por parte de Morena, para ampliar a 18 meses la permanencia de la bancada con mayoría absoluta al frente de la Mesa Directiva.
Muñoz Ledo pidió al resto de los diputados revisar el reloj que establece el tiempo para la votación de los dictámenes.
«Revisen el reloj, porque está marcando progresivamente. Cuando es una ley antigua y los transitorios son desmesurados y contradictorios hasta los aparatos se sonrojan», dijo todavía con intención de ser escuchado.
El legislador anunció este martes su retiro de la presidencia de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados con el fin de evitar una crisis constitucional, luego de que Morena anunciara su intención de reformar la ley para permanecer al frente de este órgano legislativo.
En la segunda votación de este miércoles, el PAN no alcanzó los votos necesarios para poder dirigir la Mesa Directiva.
