La mayoría de las enfermedades bucodentales son prevenibles con la práctica de hábitos de higiene dental, como el cepillado tres veces al día con pastas que contengan fluoruro, uso de hilo dental y acudir a revisión odontológica cada seis meses, informó el especialista en cirugía maxilofacial del Hospital Juárez de México (HJM), Luis Alberto Montoya Pérez.

Destacó que el cuidado bucodental inicia desde la gestación, cuando se forman los dientes, entre el tercero y sexto mes de embarazo. La alimentación de la madre debe contener vitaminas A, C, D y E, además de calcio para evitar deficiencia de mineralización del esmalte.

En entrevista, aseguró que la población pone poca atención en las enfermedades dentales y no acude de manera oportuna, cuando los padecimientos pueden tratarse en etapa inicial.

Señaló que la caries y la enfermedad periodontal son los dos problemas de salud bucal más comunes que, cuando no son atendidos, pueden desencadenar procesos infecciosos que afectan la cara, cuello, vías respiratorias, e incluso pueden provocar la muerte.

De igual manera, dijo se presentan trastornos del desarrollo como hipoplasia del esmalte, maloclusiones y anomalías dentofaciales, lesiones en la mucosa bucal, e incluso cáncer de la cavidad oral.

Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), refieren que las enfermedades bucodentales afectan a casi tres mil 500 millones de personas y constituyen una importante carga para el sector salud, ya que afectan a las personas durante toda su vida, causando dolor, molestias, desfiguración e incluso la muerte.

El médico adscrito al Servicio de Cirugía Maxilofacial del HJM señaló que entre los factores que contribuyen al desarrollo de enfermedades bucodentales se encuentran dietas ricas en azúcar, consumo de tabaco y alcohol.

En el Servicio de Cirugía Maxilofacial se tratan infecciones ontogénicas que son enfermedades que evolucionan desde un diente con caries o problemas periodontales hasta llegar a un absceso.

Asimismo, se atienden patologías maxilares, tumores benignos y quistes, fracturas mandibulares, fisuras labiopalatinas, cirugía ortognática para reparar y corregir las deformidades dento-faciales, drenaje de abscesos.

Montoya Pérez indicó que la limpieza de encías de niñas y niños que aún no tienen dientes debe hacerse con una gasa o paño dos veces al día, y ayudar a los infantes hasta los nueve años de edad en el correcto cepillado.

Precisó que las personas adultas mayores que padecen diabetes son más susceptibles a padecer enfermedades periodontales, así  como la candidiasis bucal.  En esta población es más frecuente la aparición de cáncer bucal. Es función del profesional de la odontología la identificación de factores de riesgo, reconocimiento y diferenciación de cambios propios de la edad, para brindarles tratamiento y ofrecerles una mejor calidad de vida.

La labor del profesional de la odontología es fundamental para reforzar las medidas preventivas higiénicas en las personas, como la aplicación de fluoruro, sellador para prevenir caries y el buen servicio de salud dental.