En diversos puntos del municipio de Salamanca fueron colocados señalamientos de tránsito con el propósito de que la ciudadanía corriera menos riesgo al conducir por las calles de la ciudad y mejorar la cultura vial que existe entre los conductores salmantinos.

Sin embargo, la ciudadanía no acata dichos señalamientos y son ignorados, principalmente aquel que imposibilita el estacionamiento de los vehículos y motocicletas en algunas zonas, uno de los casos más señalados ha sido en la calle Morelos esquina con la calle Ramón López Velarde, afuera de las instalaciones del Instituto Mexicano del Seguro Social y sus alrededores, donde debido al incorrecto estacionamiento de algunos ciudadanos en ocasiones camiones repartidores o camionetas de gran tamaño tienen imposibilitado el paso.

Por otra parte, las demarcaciones viales en las banquetas y en las vías de tránsito, como flechas de dirección o bien, los pasos peatonales, también son pasadas por alto por los automovilistas salmantinos.

En el caso de los pasos peatonales, estos se ven entorpecidos por el incorrecto estacionamiento de los mismos autos o bien, en algunas calles con semáforo al hacer alto total los conductores lo realizan sobre las líneas de demarcación que los señalan ocasionando que los salmantinos que transitan caminando deban poner su vida en riesgo.

Desafortunadamente no es el único conflicto existente en temas de vialidad, ya que los propios conductores han presentado quejas sobre los automovilistas que detienen su vehículo fuera de los límites en el paso a desnivel ubicado en la calle ‘Pasajero’, donde algunos microbus de transporte público que recorren por Av. del Trabajo se ven imposibilitados al momento de dar la vuelta en dirección a calle ‘Pasajero’, situación que pone en riesgo a ambos vehículos de sufrir algún accidente vehicular.

Ante ello, los propios ciudadanos continúan solicitando a los conductores que respeten las indicaciones de tránsito y los límites que se han colocado en cada una de las vías de tránsito del municipio, además de respetar los límites de velocidad establecidos, ya que, de no ser así la ciudadanía continúa expuesta a accidentes que pongan riesgo su integridad.