Los tradicionales alfeñiques, con su inigualable sabor y belleza característica, ya se encuentra a la venta en diversos puntos de Salamanca, sobre todo en la Plaza Cívica Miguel Hidalgo y el mercado Tomasa Esteves.
Este dulce tradicional, propio de la celebración del Día de Muertos, se encuentra en varias presentaciones y está listo para que las familias salmantinas lo adquieran y adornen los altares de muertos para recibir a sus seres queridos que cruzan el puente de cempasúchil y vuelven a casa para degustar aquellos platillos que en vida fueran sus favoritos.
No se trata solo de comercio, la venta de alfeñiques implica tradición que pasa de generación en generación y una preparación paciente y exhaustiva. Cada pieza posee la dedicación y cariño de quienes gustosamente lo preparan, así lo relata Estela, creadora y vendedora de este bello producto que además asegura la receta ha sido compartida desde su abuela, Refugio, pasando a su mamá, Consuelo y finalmente a ella.
Se trata de una labor ardua y que lleva su tiempo, de acuerdo con la información proporcionada por Estela, se invierten al menos 15 días para un total de entre 50 y 100 piezas, dependiendo el tipo y estilo.
Las figuras más complejas son las de menor tamaño y aquellas que se realizan a mano y no por moldes, aún así, para sus creadores cada pieza vale la pena y la invitación a los salmantinos está abierta para que en cada altar no falten los tradicionales y coloridos alfeñiques.


































