
Lo que alguna vez fue un óptimo espacio de recreación para niños y familias en Las Reynas, hoy es un escenario de vandalismo y abandono. El área de juegos ubicada frente al templo se encuentra en condiciones deplorables: juegos rotos, estructuras rayadas con grafitis y un ambiente que refleja la falta de cultura y respeto por los espacios públicos.
Vecinos de la zona han alzado la voz y exigen acciones inmediatas. “Es una vergüenza, los juegos están destruidos, llenos de rayones y basura. Parece que a nadie le importa cuidar la ciudad”, reclamó un habitante de la colonia.
El problema no es nuevo, pero la situación ha empeorado con el tiempo sin que nadie haga algo al respecto. La falta de vigilancia y mantenimiento ha permitido que el vandalismo se apodere del área, convirtiéndola en un foco de inseguridad en lugar de un espacio para la convivencia familiar.
“Queremos que esto cambie, sí, dicen que el gobierno debe hacer su parte, pero más importante es que la gente aprenda a cuidar lo que es de todos. No se vale que destruyan lo poco que tenemos”, señalaron los denunciantes.
¿Hasta cuándo seguirán destruyendo los espacios públicos? Mientras la ciudad se deteriora, la indiferencia de algunos y la inacción de otros están condenando a Salamanca a perder sus áreas de esparcimiento.