La Fiscalía General de la República (FGR) aseguró siete hectáreas del fraccionamiento “La Cucursola”, desarrollado de manera ilegal por la empresa Loma de Irapuato, propiedad del exdiputado Sergio Fernando Ascencio Barba.
Para frenar esta medida, la compañía interpuso tres amparos con los que pretende retrasar el proceso legal. No es la primera ocasión que Loma de Irapuato utiliza este mecanismo para mantener obras sin permisos y provocar daños ambientales en la Sierra de Santa Rosa.
Al respecto, el activista Gustavo Lozano llamó a los jueces a actuar con independencia y a impedir que los amparos se conviertan en un escudo de impunidad frente a delitos ambientales.


































