
Las lluvias intensas registradas en las últimas semanas han llevado a las principales presas del estado a niveles de almacenamiento extraordinarios, al punto de colocar a varias en situación de vigilancia prioritaria.
De acuerdo con información de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), dada a conocer por la Secretaría de Agua y Medio Ambiente estatal, la Presa de Mata, ubicada en Guanajuato Capital, alcanzó el 100% de su capacidad, con un volumen acumulado de 1,300 hectómetros cúbicos, convirtiéndose en la de mayor llenado en la entidad.
En ese mismo municipio, la Presa La Esperanza reportó un 99% de almacenamiento, con 0.850 hectómetros cúbicos, lo que la coloca también en foco rojo por el riesgo de desbordamiento.
La Presa El Palote, localizada en León, registró un incremento notable: pasó de apenas un 3% de almacenamiento hace dos meses a un 64% actual, lo que refleja el impacto de las precipitaciones continuas.
Por su parte, la Presa Ignacio Allende, en San Miguel de Allende, y la Presa Solís, en Acámbaro, se encuentran ambas en un 73% de su capacidad, niveles considerados altos para la temporada. La Presa La Golondrina, en Pénjamo, reporta un 64% de llenado.
En contraste, existen al menos dos cuerpos de agua que mantienen bajos niveles. La Presa Mariano Abasolo, en Pénjamo, presenta un 37% de almacenamiento, mientras que la situación más crítica corresponde a la Presa Peñuelitas, en Dolores Hidalgo, que apenas alcanza un 5%, condición que la coloca en foco amarillo de monitoreo constante.
Las autoridades exhortaron a la población a mantenerse atenta a los comunicados oficiales ante cualquier liberación controlada de agua y a tomar precauciones, especialmente en zonas cercanas a los cauces y ríos que alimentan estas presas.