
La Comisión de Salud Pública del Congreso local aprobó por unanimidad un dictamen que rechaza las propuestas para garantizar el derecho a la autonomía reproductiva y establecer como obligación del Estado los servicios de salud sexual y reproductiva, incluyendo el aborto legal.
Aunque los diputados de Morena, Antonio Chaurand y Miriam Reyes, inicialmente se pronunciaron en contra del dictamen negativo, terminaron votando a favor por aparente confusión. Anteriormente, ambos se habían mostrado a favor de que las iniciativas, una de su propio partido y otra de Movimiento Ciudadano, siguieran su curso.
Durante la sesión, se aprobó por consenso una adición propuesta por Chaurand, y ese documento será el que se someterá a discusión en el pleno del Congreso el próximo jueves.
A pesar del resultado en comisión, Chaurand reiteró su postura a favor de que el Estado garantice el acceso a servicios seguros para la interrupción legal del embarazo. Señaló que los abortos en condiciones de inseguridad tienen un alto costo humano y económico que podría evitarse con leyes más permisivas y servicios adecuados.
Por su parte, la diputada Carolina León Medina, del Partido del Trabajo, también expresó su respaldo a ambas iniciativas sobre el aborto. En entrevista, defendió el derecho de las mujeres a decidir sobre su cuerpo y consideró que el Estado debe proporcionar los medios para que ese derecho sea efectivo.
En contraste, el diputado del Partido Verde, Contreras Guerrero, indicó que su bancada apuesta por la prevención a través de políticas públicas enfocadas en una educación sexual abierta y responsable, y no por la legalización del aborto como primera opción.
La discusión en el pleno se perfila como uno de los momentos más tensos y polémicos en el Congreso local en lo que va del año.