Una joven mujer perdió a su hija recién nacida en el Hospital General de Salamanca luego de que familiares denunciaran una presunta atención tardía por parte del personal médico, pese a que la bebé aún presentaba signos vitales al momento de llegar a las instalaciones.
De acuerdo con los testimonios, la madre acudió al hospital y la bebé aún mostraba señales de vida, sin embargo, falleció antes de nacer. A partir de ese momento, los familiares aseguran que el trato médico fue deficiente y que la paciente pasó más de 24 horas sin ser intervenida quirúrgicamente, lo que generó angustia y reclamos.
El caso provocó indignación en redes sociales, donde decenas de personas afirmaron haber vivido situaciones similares en ese mismo hospital. Algunos señalaron falta de empatía por parte del personal y malas prácticas durante la atención obstétrica.
Una usuaria relató que hace un tiempo fue enviada a su casa pese a tener contracciones. “Me dejaron dos días con dolores. Cuando por fin me atendieron, mi bebé ya se había hecho del baño dentro del útero. No respiró al nacer y estuvo internado 10 días”, escribió.
Otra mujer compartió que, en su caso, su hija estuvo a punto de morir por una atención tardía. “Me regresaban una y otra vez, me decían que caminara. Cuando por fin me operaron ya estaba perdiendo líquido amniótico”, expresó.
Además de las denuncias ciudadanas, algunos comentarios en redes sociales señalaron que en casos de muerte fetal intrauterina no siempre se realiza una cesárea de inmediato, ya que existen protocolos médicos que recomiendan inducir el parto por vía vaginal, salvo que haya riesgos directos para la madre.
Según guías clínicas de la Organización Mundial de la Salud, cuando el feto ha fallecido, lo más indicado es inducir el parto con medicamentos como oxitocina dentro de las primeras 24 a 48 horas, ya que la cesárea conlleva mayores riesgos como hemorragias, infecciones o complicaciones en futuros embarazos.
Sin embargo, especialistas coinciden en que, más allá del procedimiento clínico, debe prevalecer la comunicación efectiva, el acompañamiento emocional y la empatía, especialmente en situaciones tan delicadas, lo que aseguran, no ocurre en lo casos previamente señalados por la ciudadanía.
Hasta el momento, las autoridades de salud no han emitido una postura oficial sobre el caso.


































