
La mañana de este martes, policías municipales hombres y mujeres detuvieron sus labores para exigir al gobierno mejores condiciones de trabajo y equipo adecuado para enfrentar la delincuencia y brindar un mejor servicio a la sociedad.
Los uniformados también demandaron la renuncia del director de la policía, acusándolo de falta de sensibilidad ante sus reclamos. Sin embargo, el gobierno de Pénjamo se ha resistido a realizar cambios en los altos mandos.
El paro de labores surge tras la agresión sufrida por policías municipales en la colonia Corral de Piedra, donde fueron atacados con más de 40 disparos mientras atendían un reporte ciudadano.
Los agentes exigen al gobierno morenista respeto a su dignidad como servidores públicos encargados de la seguridad, denunciando que carecen del equipo necesario para patrullar las calles y prevenir el delito.