ANTE POSIBLE NEGLIGENCIA MEDICA, PADRES DE BEBE PIDEN ESTUDIO A FONDO DE SU CASO
- Temen por su salud, después de sufrir perforación de intestino y su notable retroceso físico
- Sus padres dijeron no entender el motivo porqué en 15 días el pequeño no ha mejorado
La incomprensible perforación del intestino y el desmejoramiento físico que en quince días ha mermado notoriamente al pequeño Jesús Emiliano de apenas 3 años de edad y que sus angustiados padres han notado en las últimas dos semanas desde que ingresara caminando al Hospital General de Salamanca, ya ni siquiera le es posible sostenerse, mucho menos caminar luego de que fuera operado por segunda ocasión.
“Estamos en una situación desesperante, porque la verdad trajimos al niño enfermito, ya casi van más de quince días y así como lo trajimos así continúa, y el niño ya lleva dos cirugías”, comentando que el diagnóstico inicial fue apendicetomía, pero el pasado martes fue operado por segunda vez con el diagnóstico “tenía los intestinos perforados (..) ellos dicen que por secuelas de la (primera) cirugía”, señaló entre lágrimas el padre del pequeño Juan Carlos Razo.
Con voz entrecortada -dijo- que la preocupación supera la paciencia que les ha pedido la Secretaría de Salud a través del director del Hospital, toda vez que “no nos han dado una explicación lógica y queremos ver si a través de este medio, nos hacen un poco más de atención y caso; de hecho, el sábado (antepasado) nos lo enviaron a León y nos lo regresaron, porque dijeron que no era necesario que allá se quedara”.
Señaló que su mayor desesperación es porque ni siquiera saben el nombre del médico que una madrugada lo recibió en el área de urgencias y ordenó la inmediata intervención, lo que no cuestiona, no así lo que pudo haber hecho de más o dejado de hacer durante la operación y que originó la perforación de los intestinos, porque de acuerdo al primer diagnóstico era que no había rompimiento del apéndice y que era precisamente lo que se quería evitar.
El jefe de esta joven familia procedente de la comunidad de Cerro Gordo municipio de Salamanca, comentó que, para tener una información más sólida del estado de salud de su hijo, acudió con un especialista particular para saber si el tratamiento es el adecuado, sin embargo, la percepción del médico de acuerdo la información que le proporcionó “nos dicen que es una negligencia médica que no quieren reconocer” y lo peor es que el médico que lo atiende “nunca nos dice nada, sólo se concreta a llegar, eso sí con un montón de gente, pero sólo llega le revisa la herida y sin decir ninguna palabra se retira.
Aunque su condición es estable, dijo que su preocupación es que el pequeño pueda agravarse y poner en riesgo su vida, así como el que llegue a quedar con secuelas por las complicaciones “porque el intestino no da señales de que está funcionando”, apuntó.
«Pero lo más preocupante es que no mejora» Juan Carlos Razo padre del pequeño con lágrimas en los ojos y voz entrecortada por la pena de ver a su pequeño “cada vez peor, cuando que llegó caminando al Hospital por un dolor de estómago y de urgencia fue operado por apendicitis”.
Juan Carlos Razo trabajador de ingeniería civil comentó que por la enfermedad de su hijo, ha tenido que dejar de trabajar para estar pendiente de la salud de su hijo, ya que su esposa está embarazada, además por la condición del niño les autorizaron en el hospital estar los dos al cuidado, por lo que reciben ayuda económica de sus familiares.
Por tan preocupante situación, los padres del pequeño pidieron a la Secretaría de Salud un estudio médico a fondo del pequeño, así como una revisión del caso para determinar si existió negligencia médica y sobre todo que se les garantice que la vida del pequeño no está en riesgo y que no tendrá secuelas por la perforación del intestino que sufrió.
