- Esteban Hernández titular de Cultura, todavía puso en duda si fue por descuido o por ignorancia el daño irreversible a la historia de Salamanca.
Esteban Hernández director de Casa de la Cultura admitió que nunca supo, ni por enterado se dio de cuándo y cuántos testigos históricos de la pintura y material original que los monjes agustinos y salmantinos de hace cuatro siglos emplearon en la edificación y embellecimiento del imponente Claustro Menor del Ex convento Agustino de San Juan de Sahagún.
“No tengo claridad como lo he mencionado en otra ocasión, no recuerdo exactamente cuándo haya sido esta situación. Estamos conscientes de que si, no sabemos si fue por descuido, fue por ignorancia o por lo que haya sido, que se cubrió dos testigos”, cuando en realidad fueron tres pequeños recuadros dejados por restauradores especializados como testimonio histórico de los materiales empleados.
Con su testimonio el funcionario, dejó en claro que los trabajos de remozamiento que se realizan al claustro menor, las labores realizadas no se realizan con los cuidados que requiere el edificio, así como tampoco existe el conocimiento o el interés y mucho menos se ha procurado contar con una supervisión especializada para todas y cada una de las labores que se realizan para su conservación y buena imagen.
“Es una práctica que se viene realizando ya de tiempo atrás, no es algo nuevo y precisamente en una de esas ocasiones, cuando sucedió”, al admitir que como responsable del recinto arquitectónico de Salamanca “no tenemos claridad, no recuerdo en este momento” cuando y en qué momento se pintaron los testigos, al parejo que el resto de las paredes del interior del Claustro Menor.
“Cada que hay un evento significativo de manera programada, se hacen algunas reparaciones para mejorar la imagen del recinto” y cubrir las manchas que de manera irresponsable e indebida muchas personas hacen, rayan y ensucian premeditadamente con las mismas pinturas que por ser naturales y especiales de aquel entonces, se caen y se pintan fácilmente, provocando el deterioro del recinto.
El director de cultura dijo que con anterioridad inspectores del INAH se habían presentado para hacer inspecciones y lejos de hacer observaciones sobre un mal trato al recinto, “incluso hasta nos han dado comentario que en comparación con otros recintos, (..) nos han dicho que está bien atendido”.
Para concluir dijo que esperarán saber si el Instituto Nacional de Antropología e Historia -INAH- les hace llegar alguna observación, anunciando que por el momento se está gestionando un programa de restauración del Claustro Menor sobre todo para atender daños por la humedad.
Por lo que respecta a la colocación de un toldo y a las ranuras realizadas en la pared que sostiene y protege la cantera de los dos relojes de sol, para la colocación de una gran estructura, el director de Cultura dijo que esos hoyos para colocar alcayatas, fueron realizadas desde la pasada administración.