- Vecinos de la ampliación La Gloria se dijeron extrañados por el desinterés de la corporación para intervenir.
En lugar de poner orden, la tolerancia de elementos de Tránsito Municipal para hacer que se respete el sentido de la circulación y que vehículos al transitar por la calle Serafines, sobre todo a la hora de entrada y salida de las escuelas primaria Solidaridad de la colonia Ampliación La Gloria, ha sido causa de conflictos y el riesgo de que se origine algún conflicto.
Vecinos de la vialidad indicaron que son constantes los conflictos que se originan, porque los automovilistas circulan “como les viene en gana, son perfectamente visibles los señalamientos que indican el sentido de la calle y aún sabiendo hacia dónde deben circular y menos aún que no es doble sentido, no respetan y menos a la hora de entrada y salida de la escuela”, indicó el señor identificado con el nombre de Ignacio.
Por circular como les place, son varios los conflictos que se han originado, “porque todos quieren pasar y estacionarse como quieren”, señalaron entrevistados, al comentar que para poner orden se ha reportado a la Central de Emergencias 911, “pero nos dijeron que ellos no atienden esos reportes”.
Sin embargo minutos después arribó una patrulla de policía “pero nada mas llegaron a montar guardia, como vigilando mientras salían los escolares y pusieron nada más esos conos de color naranja, para bloquear el tráfico”, pero nunca se hicieron acompañar, ni solicitaron el apoyo de elementos de Tránsito Municipal.
Los entrevistados comentaron que desafortunadamente el mal ejemplo, es impuesto por uno de los encargados de la tiendita escolar, quien es el primero en circular y estacionar su camioneta con numero de placas GX91430, en sentido contrario, frente a la escuela, imponiendo el desorden.
Sobre este hecho, vecinos de la ampliación La Gloria Señalaron dos punto a resaltar, uno de ellos las causas de poner trabas y justificaciones para no atender el reporte y en segundo, los motivos sorprendentes e incomprensibles de no proceder conforme a la Ley, “tal parece que no hay autoridad y aplican el Reglamento como les conviene; pasan ciclistas, motos, autos, papás con niños montados en las canastillas circulando en sentido contrario y de nada sirve que sean autoridad, cuando se supone que para eso están y si no quieren multar, por lo menos deben hacer valer su autoridad para poner orden y apercibir para que todos se conduzcan respetando el Reglamento”.
