Autoridades agrícolas mexicanas, descartaron que la muerte de 300 aves en las costas del Pacífico fueran a causa de gripe aviar, al concluir que fue la falta de alimento, hecho ocasionado por las altas temperaturas en el mar.
Por otra parte, la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, aseguró que las aves no presentaron enfermedades como la influenza de alta patogenicidad AH5N1 y la enfermedad de Newcastle.
Durante el operativo realizado en la primera quincena del mes de junio, se concluyó que los animales en realidad, murieron de inanición, es decir, por extrema debilidad física a causa de la falta de alimento.
Lo anterior derivado del fenómeno meteorológico de El Niño, que causa un incremento en la temperatura de las aguas del Pacífico y provoca que los peces bajen a la profundidad en busca de aguas más frías, hecho que impide a las aves marinas capturar su alimento”, precisó la dependencia mexicana.
Aseguraron además que las aves que fueron previamente capturadas se encontraban en condiciones de deshidratación y bajas de peso, confirmando con necropsias realizadas por veterinarios y biólogos la causa de su muerte,
El Senasica informó que la especie que presentaba mayor afectación fue la pardela de dorso gris, conocida también como pardela oscura o fardela negra, ave que llega a volar entre 500 y 900 kilómetros diariamente, por lo que las cantidades de alimento que necesitan para sobrevivir son altas.
Las zonas que presentaron mayores afectaciones fueron en los estados de Chiapas, Oaxaca, Guerrero, Michoacán, Jalisco, Colima, Nayarit, Sinaloa, Sonora, Baja California y Baja California Sur.