El proceso de clausura de las celdas 1, 2 y 3 del relleno sanitario de Salamanca está en curso. Desde la inauguración de la cuarta celda el viernes 26 de enero, se ha dado inicio a este proceso de manera gradual. Se prevé que en los próximos meses se culmine por completo el cierre de estas celdas iniciales, lo que permitirá concentrar las operaciones en la nueva celda. Esta última, con una expectativa de vida útil de 12 años, será crucial para gestionar los desechos de la población salmantina.
Las autoridades municipales, a través del director de Servicios Públicos Municipales, han destacado la importancia de este cierre. Se llevará a cabo mediante el proceso de terraplenado, el cual consiste en rellenar el área con tierra para elevar su nivel y crear una superficie estable. Esta medida busca prevenir problemas relacionados con los lixiviados, especialmente con la proximidad de la temporada de lluvias.
Además, se está considerando la posibilidad de establecer un quinto espacio para la disposición de desechos en el futuro. Durante los 12 años de vida útil estimada de la nueva celda, las autoridades planean trabajar en la planificación y preparación para esta eventualidad. El cierre progresivo de las celdas antiguas es un paso fundamental en el manejo responsable de los residuos y en la protección del medio ambiente local.