La ciudad de Irapuato suma un nuevo golpe en su infraestructura urbana.
El 17 de julio, apareció el colapso número 29 en Paseo Irapuato, un recordatorio más de que bajo sus calles existe una red de alcantarillado al borde del colapso.
Hasta esa fecha, ya se contaban 28 hundimientos documentados, todos evidenciando las fragilidades acumuladas durante años.
Las autoridades locales han determinado que 13 de estos puntos serán reparados mediante contratos específicos, mientras que los otros 15 serán intervenidos directamente por JAPAMI, a través de su Gerencia de Operación y Mantenimiento. Pero la jornada del 17 de julio trajo consigo más que números, reveló también nuevos riesgos.
Ese día se presentaron los resultados de un estudio de radar de penetración terrestre en el Blvd. Arandas, esta tecnología de georradar no invasiva permite ver el subsuelo utilizando pulsos electromagnéticos, lo que encontró no fue dos nuevas oquedades de alto riesgo que se sumaron al mapa de preocupación.
Una se encuentra localizada a 200 metros del primer colapso reportado; la otra, en la intersección con el Blvd. Estrella. Ambas zonas mostraron un terreno especialmente blando, vulnerable a futuras fracturas. Por suerte, siete zonas sospechosas fueron descartadas tras una evaluación geotécnica.































