El posible regreso de aranceles al jitomate mexicano por parte del gobierno de Estados Unidos ha encendido las alertas entre los productores de Guanajuato, quienes temen que esta medida afecte directamente sus exportaciones y genere pérdidas económicas.
Aunque no hay una fecha definida para la aplicación de estas tarifas, el anuncio del Departamento de Comercio de EE.UU. ha generado incertidumbre en el sector agrícola del estado. La medida surge de una investigación en la que se acusa a los exportadores mexicanos de vender jitomate por debajo del precio justo en el mercado estadounidense, lo que podría dar pie a sanciones comerciales.
Para Guanajuato, esta situación representa una amenaza seria, ya que gran parte de su producción de jitomate fresco se destina a la exportación, particularmente hacia Estados Unidos. De aplicarse los aranceles, los costos de venta aumentarían y podrían poner en riesgo la competitividad de los productores locales.
Líderes del sector han expresado su preocupación y piden a las autoridades mexicanas que intervengan para evitar afectaciones mayores. Advierten que una eventual imposición de impuestos no solo perjudicaría a los exportadores, sino también a trabajadores del campo, empacadoras y transportistas que dependen de esta industria.
El tema aún se encuentra en revisión, pero los productores guanajuatenses ya evalúan posibles escenarios ante una decisión que podría impactar al campo mexicano en su conjunto.































