http://https://youtu.be/_xy-t02u180
Hace 10 años ciudadanos de Salamanca podían vivir en paz, dejaban las baterías de sus autos por las noches y al día siguiente ahí mismo la encontraban.
Desgraciadamente la situación hoy día ya no es la misma a nivel local, estatal y nacional, al menos eso piensa los ciudadanos, quienes piensan que cualquier cosa de valor para los delincuentes es buena para conseguir un poco de dinero sin trabajar.
Actualmente encadenar las baterías o de plano quitárselas durante la noche, es parte de la nueva forma de vida en Salamanca, situación que ha obligado a que los maleantes se lleven los medidores de luz.
Sobre la calle Juárez dueños de negocios y casas han optado por instalar rejas metálicas.
A decir de las personas afectadas los medidores son comprados entre 150 y 200 pesos, existe la versión de quienes los adquieren los revenden a gente de la CFE, los cuales a su vez se los ofrecen a otras personas que no cuentan con el medidor.
Por último, en un recorrido hecho por este medio informativo en varias calles del Centro Histórico de Salamanca, por cada 10 casas 6 tienen una protección de fierro con su respectivo candado.