Tras décadas de exposición a contaminantes peligrosos, la comunidad de Salamanca finalmente puede respirar tranquila. La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT) terminó los trabajos de remediación en el sitio de Tekchem han concluido, eliminando los riesgos que durante años pusieron en peligro la salud de la población.

El terreno, conocido por su alta concentración de compuestos tóxicos como mercurio y pesticidas clorados, ya no representa una amenaza para los habitantes. “Hoy podemos afirmar que este lugar está libre de riesgos”, aseguraron autoridades ambientales al informar sobre el cierre del proyecto, que comenzó como una prioridad del gobierno federal para proteger a los ciudadanos tras años de abandono.

Durante el proceso, se retiraron sustancias químicas altamente peligrosas que, si no se manejan adecuadamente, pueden causar envenenamiento severo. Esta situación se agravó en el pasado, cuando personas ingresaron ilegalmente para saquear materiales, exponiéndose a contaminantes sin conocer los riesgos. Con la remediación finalizada, estos peligros han quedado atrás.

Uno de los momentos más oscuros en la historia ambiental de Salamanca fue el incidente del 12 de septiembre de 2000, cuando una nube tóxica liberada desde la planta de Tekchem afectó a miles de personas. Este suceso, que dejó secuelas en la salud de la población, simbolizó durante años la indiferencia hacia los impactos ambientales en la región. Sin embargo, con la intervención reciente, las condiciones han cambiado de manera decisiva.

El proyecto de saneamiento abarcó 26.7 hectáreas, donde se eliminaron plaguicidas peligrosos como el DDT, mercurio y otros compuestos orgánicos persistentes. Gracias a esta labor, la salud pública y el entorno están ahora garantizados para las generaciones presentes y futuras. Las autoridades recalcaron que ya no existe riesgo alguno para quienes viven cerca del área, devolviendo la tranquilidad a las familias que durante años temieron por su bienestar.

Esta remediación pone fin a una larga deuda ambiental con Salamanca. Hoy, los ciudadanos pueden estar seguros de que la zona ya no representa un peligro para su salud, marcando el inicio de una nueva etapa en la que se privilegia el cuidado del entorno y la seguridad de la comunidad.