SALAMANCA DETENIDO ECONÓMICAMENTE, TAL PARECE QUE A NINGUNA AUTORIDAD LE INTERESA EL CRECIMIENTO EN BENEFICIO DE LOS SALMANTINOS.
El municipio de Salamanca se encuentra en un rezago económico que por lo menos se hizo sentir con mayor fuerza desde el mes de enero de este año de 2016.
Las quejas de los ciudadanos son generalizadas, desde la falta de empleo, hasta la propia inconformidad de los comercios establecidos en Salamanca que ven con tristeza que el municipio se encuentra en plena recesión económica.
La falta de planeación ha sido la constante, desde la falta de una estrategia perfectamente armonizada, hasta la propia falta de capacidad de los funcionarios encargados de empujar el avance económico en Salamanca.
En municipios aledaños como es Irapuato y el propio Valle de Santiago, la instalación de nuevas empresas y comercios es una constante, en Salamanca posterior a la llegada de Mazda todo prácticamente se detuvo.
La infraestructura de la ciudad se ha visto nula en cuanto a un verdadero crecimiento ordenado y sistematizado del municipio.
No hace falta ir más lejos, el parque industrial de Salamanca se encuentra en un verdadero abandono, sus entradas lucen desechas, mal planeadas, y todo indica que a ninguna autoridad le interesa el crecimiento económico; muy seguramente las nuevas
empresas prefieran seguir estableciéndose en los municipios aledaños por la falta de infraestructura del municipio.
Pensar en nuevos parques industriales y vialidades acordes al crecimiento de un municipio que pretende salir adelante parece ser un pecado.
Eventos de firma de “compromisos demagógicos” se hacen de manera muy frecuente, el consolidarlos ha sido realmente imposible.
Si a esto le sumamos que la refinería de Petróleos Mexicanos va en franca decadencia, y que no hay el establecimiento de nuevos negocios que generen empleos y que estos sean mejor remunerados, habla ya de una apatía en incentivar a Salamanca.
Desafortunadamente parece ser que no existe un plan alternativo para tratar de sacar adelante a Salamanca del bache económico que hoy es una triste realidad.
No suena muy alentador ver que el municipio de Valle de Santiago comience a rebasar económicamente a Salamanca por la ociosidad en el cual definitivamente ha caído ya la administración municipal que parece más enfocada en resolver sus enconadas luchas de poder internas.
Lo único que resta es esperar que a alguien en el gobierno municipal le empiece a preocupar la situación verdaderamente, y sobre todo, que comience a realizar una planeación seria y eficaz económicamente ya que de seguir con la inercia que se tiene, la situación económica de los salmantinos continuará decreciendo en perjuicio del municipio, e inclusive de los propios bolsillos de los gobernantes por obvias razones.