Jóvenes que laboraban en una tienda de ropa, ubicada por Avenida San Antonio, aseguraron haber recibido un trato arbitrario por parte del la dueña del local.

Las jóvenes aseguran que la empleadora les negaba el horario de comida así cómo un periodo de descanso,asegurando, además de que no les daba permiso de ir al baño por presunto «descuido de área».

De igual manera, comentaron que no tenían día de descanso, por lo que si decidían ausentarse, su nómina llegaba incompleta.

Las mujeres indicaron que no son las primeras empleadas que reciben este trato, pues aseguran que la deserción es frecuente, debido a que la dueña les habla de manera inapropiada y con palabras altisonantes.