Sabes que ya viene el mes más emocionante del año cuando tu calendario se empieza a llenar de cenas, convivios, posadas y fiestas … ¿Que de cuál hablo? ¡Pues claro! Me refieron a diciembre.
Este mes es increíble porque las calles se llenan de aromas inconfundibles como la manzana, los cítricos, pino y otros más, además de muchísima gente por todas partes; pero también porque en este mes vives las emociones más bonitas que puedas tener. Aquí te comparto 6 de esos sentimientos que te provoca esta hermosa temporada.
Creo que si hay algo que destaca este mes es la alegría que se siente por todas partes. Es en diciembre cuando, pase lo que pase, encuentras una razón para estarlo, ya sea que vienen vacaciones, un año nuevo para cumplir, ahora sí, lo que nos propongamos, o tienes la esperanza de cambios buenos en la vida.
Si algo tiene este mes, es que a todo mundo le da por dar gracias: ya sea porque se haya acabado un ciclo, porque se tenga la oportunidad de convivir con más gente, o por el sencillo hecho de que se vivió tan bien este año que termina que agradeces que haya sucedido.
Te emociona saber que llegó el mes con más pretextos para salir de fiesta, convivir con tus amigos y sentir que todos los días son de fin de semana. Además, creo que es el mes en que nos apapachamos mucho porque nos compramos cosas bonitas para vernos bien.
Ya que es la época en que puedes ver a todos tus seres queridos (hasta los que viven en otro país), a tus amigos de la infancia y recibir muchos regalos -por eso de los intercambios-, etc.
Optimismo
Va de la mano de la esperanza y es recurrente en este mes: siempre añoras que no importa lo que pase, pero que todo salga bien.
Creo que si hay algo tiene este mes es que es… ¡mágico! Lo digo, porque es el mes en el que mucha gente se anima a abrir sus corazones, se acerca a las personas que nunca se atrevieron a decirles lo que siente, o sucede lo que menos esperas…