Por: Observadora exterior
Buenos días lectores, feliz año nuevo! En Salamanca terminamos e iniciamos un año más con altos niveles de contaminación ambiental; celebraron el 413 aniversario un día antes de su conmemoración por eso de la «cruda realidad» del primero de enero y todo indica que este año la recaudación se hará por todos los medios posibles por eso del recorte presupuestal. Aquí la opinión de la semana.
Año nuevo.
Este primero de enero los salmantinos no sólo le dimos la bienvenida a un año más, sino que también estuvimos de manteles largos por la conmemoración del 413 aniversario de la fundación de nuestra ciudad y que las autoridades municipales (como lo hizo la administración pasada) celebraron desde el día 31 de diciembre por eso de que la desvelada o la cruda realidad del día primero no los dejará levantarse para conmemorar la fecha que, usted recordará, el pasado Ayuntamiento encabezado por Justino Arriaga Rojas, pretendía incluso cambiar para el 16 de agosto. Al parecer a los dos alcaldes más jóvenes que ha tenido Salamanca les ha importado más la fiesta que los compromisos a los que se hicieron acreedores al aceptar la chamba de presidente municipal.
Pirotecnia & Contaminación.
Un aparatoso incendio ocurrido esta semana en las periferias de RIAMA no sólo provocó alarma en la población salmantina, sino también un gran efecto en la ya de por sí mala calidad del aire que en las últimas semanas se ha presentado con mayor intensidad en nuestro municipio. Al parecer la pirotecnia fue la responsable en la mayoría de los incendios registrados esta semana, aunque algunos días el olor ambiental se asemejaba más a hidrocarburo que a pólvora. En fin, parece que el 2015 se quiso despedir recordándonos que las autoridades de los tres órdenes de gobierno aún tienen una deuda pendiente con los salmantinos en materia ambiental y que este tema que por años se ha querido minimizar, aún está latente.
La controversia.
Los índices de contaminación registrados en Salamanca la última semana del 2015 trajeron cierta controversia por las declaraciones de un ambientalista. Que si se superaron los índices de China, que si son partículas menores a 10 o 2.5 micras, que si se miden en partes por millón o microgramos por metro cúbico, que si el ecologista dio mal la información. El punto señores, es que la contaminación en Salamanca es por demás preocupante y la indiferencia de las autoridades sigue siéndola misma que hace años a pesar de los efectos a la salud a los que nadie está exento; y me parece aún más preocupante que quienes tienen cierto poder para alzar la voz en beneficio de los ciudadanos, se ocupen más en señalar los errores de los ambientalistas que en poner su granito de arena para exigir nuestro derecho a vivir en un ambiente propicio para nuestro desarrollo y eso no significa hablar mal de Salamanca sino ser conscientes de una realidad que nos ha rebasado.
La ignorancia o los intereses políticos.
Para algunos salmantinos ha causado gran indignación el uso de pirotecnia a pesar de la mala calidad ambiental, esto se debe a una sola razón: la ignorancia. A poco más de 10 años de haber entrado en vigor el Programa para Mejorar la Calidad del Aire (ProAire) de Salamanca la realidad es que gran parte de la población lo desconoce, aún no saben qué es una precontigencia y mucho menos qué hacer o no hacer cuando ésta es decretada. En su momento, se creyó que con el ProAire se vendría a solucionar la problemática ambiental de Salamanca, pero a más de 10 años de su ejecución, vemos que no fue así y que el desconocimiento de la población se debe en gran medida a intereses políticos.
En abonos chiquitos/ Mucho ruido y pocas nueces
Quienes vieron la de a de veras fueron los tianguistas de la Unión de Comerciantes San Antonio a quienes el gobierno local les puso un alto, al impedir que el pasado miércoles se instalaran en las periferias del mercado Tomasa Esteves a consecuencia de un adeudo de más de 5 años del pago por derecho de piso que ya superaba los 500 mil pesos. Aparentemente las mesas de negociación no habían surtido efecto y las autoridades municipales se fueron hasta las últimas consecuencias y los tianguistas no tuvieron de otra más que doblar las manos y comprometerse a pagar, pero eso sí, no sin antes que el municipio les hiciera su respectivo descuento y además les diera chance de pagar en abonos “chiquitos para pagar poquito” pues la deuda se les redujo en promedio unos 200 mil pesos. Vaya que el recorte presupuestal para este año, si está poniendo a trabajar a las autoridades en temas que habían que vaya usted a saber por qué habían dejado pendientes por tanto tiempo.
Aquí la pregunta es ¿los comerciantes seguirán creyendo en sus líderes quienes hasta ahora solo han demostrado trabajar por un beneficio propio?
Los tianguistas deberían de empezar a pensar en exigir a sus lideres un recibo por cada uno de sus pagos, con el cual ellos puedan demostrar que han estado cumpliendo con sus compromisos para tener un lugar donde trabajar y no solo engordando los bolsillos de algunos cuantos.
El cierre y el reto de la seguridad.
Vaya cierre de año el que tuvimos en materia de seguridad, desde detenidos por portación de armas y droga hasta una persona con apenas tres meses de radicar en Salamanca y ya había sido secuestrado y aparentemente torturado, pero que logró escapar de sus secuestradores. Sin duda el 2016 será un año más en el que la seguridad se suma, con mayor importancia, a los temas de más prioridad a los que el municipio deberá brindar gran atención, que no sólo se vea reflejado en las estadísticas poco confiables, sino en la percepción ciudadana. ¿Este tema habrá estado en la lista de deseos por mejorar del alcalde? Ya lo veremos.
Le contestan.
El director de Protección Civil este fin de año se puso melancólico y en una muestra de su sentir realizó una llamada vía radio al 066, por eso de que no le fueran a contestar por el teléfono como es su costumbre, y al comunicarse a la central de emergencias para desearles a los trabajadores un feliz año nuevo, con voz quebrada les dijo que desea que Salamanca crezca más y más y más. Sólo esperemos que sus deseos también estén en que él vaya conociendo el municipio en donde vive y trabaja e incluya también el propósito de finalizar el tan necesario e importante atlas de riesgo de nuestro municipio porque si no, “ya bailamos las calmadas”.
ACTIVIDADES PRIVADAS
El que aún parece no entender que desde el 10 de octubre del 2015 es el presidente municipal del municipio de Salamanca y no solo el administrador de una empresa privada es Antonio Arredondo, quien en contadas ocasiones se le ha visto públicamente, y esas pocas veces sus colaboradores buscan que sean eventos alejados de la prensa. Al parecer no confían en que el joven alcalde pueda torear las preguntas de los reporteros, con decirles que este año incluso la comida organizada (forzada) para los elementos de seguridad vial fue marcada en agenda del alcalde como reunión privada; quizá debamos explicarle a quien le organiza dicha agenda es que el alcalde se debe a los salmantinos, quienes además son los que pagan su sueldo y las reuniones privadas serían aquellas que tengan que ver con su vida del mismo nombre «privada», todo lo que tenga que ver con acciones que afecten (para bien o mal) el desarrollo el municipio son, o deberían de ser públicas señores.
Pero bueno, parece que el 2016 pinta con la sutil amenaza de la aplicación a cabalidad de todos los reglamentos, pues el reducido presupuesto que se asignó a Salamanca para el ejercicio fiscal del 2016 no será suficiente para los proyecto del actual gobierno, pero eso ya lo veremos sobre la marcha, mientras tanto amigos lectores ¡Feliz Año Nuevo!