- Entre lágrimas, porras y mensajes de repudio, exigieron justicia para su amigo “Cabañas”.
- Vestidos de uniforme y con globos blancos, compañeros del colegio y del equipo de futbol lo reclamaron “En el Cielo sobra un Ángel y en la cancha falta un jugador”.
Entre lágrimas de impotencia y gritos ahogados que claman justicia, la tarde de este miércoles fue despedido como el gran estudiante y futbolista que fue su amigo “Cabañas”, como cariñosamente es recordado por sus compañeros, amigos y familiares el pequeño Fernando, quien a los 12 años de edad lamentablemente perdió la vida, víctima de la inseguridad que asola a Salamanca.
Cientos de niños y personas que se congregaron en la parroquia del Sagrado Corazón de Jesús de la colonia Bellavista para participar de la misa de cuerpo presente y darle el último adiós, la mayoría con el uniforme del plantel, aunque otros vestidos de blanco y del equipo Monarcas Morelia donde militó, entre porras, aplausos y globos blancos que soltaron, como un mensaje de paz; pero también de dolor y repudio por la forma tan artera como perdió la vida, su amigo y compañero.
Durante un breve tributo brindado a la salida del recinto religioso, además de sus compañeros de 2do. “B”, una gran cantidad de los alumnos de la escuela secundaria del Colegio Josefa Ortíz de Domínguez, con pancartas con su fotografía donde se leían desde mensajes de resignación y reconocimiento, también se leían cartulinas con frases de repudio por la inseguridad que hasta su propio hogar lo alcanzó.
Las demandas de justicia y de exigencia no solo para que se castigue a los responsables, sino también para que se ponga un alto definitivo a la inseguridad está también amenazando a los niños, jóvenes y a toda la población de Salamanca.
Mientras se escuchaban las porras de sus compañeros de equipo Monarcas y de la selección de futbol de la escuela, maestros manifestaron su tristeza por la pérdida tan lamentable que es y será el pequeño Fernando, un alumno dedicado, estudioso y educado, como lo demostró al tratar de proteger a su hermano menor y a su hogar, cuando delincuente intentaron asaltarlo por segunda ocasión, perdiendo lamentablemente la vida.
Por lo que fue el pequeño “Cabañas” como jugador sus compañeros y entrenadores del equipo Monarcas, a través de una manta, manifestaron la gran pérdida de uno de sus delanteros, despidiéndolo con la emotiva frase: “En el cielo sobra un Ángel y en la cancha falta un jugador” que dobló al más fuerte de lo ahí presentes.
Mientras veían partir la carroza que conducía el féretro hacia su última morada en el panteón La Cruz, maestros del plantel manifestaron el gran dolor que es para todo el plantel esta pérdida, recordándolo como un alumno alegre, futbolista “era nuestro centro delantero en nuestra selección; un chico siempre alegre, guerrero, respetuoso, atento, disciplinado”, señaló el maestro Javier Sánchez.
Coincidieron que su muerte, es una pérdida irreparable sobre todo porque es una víctima de la violencia cada vez crece más y cobra vidas muy tempranas, “yo creo que es un llamado fuerte para las autoridades, porque el que nuestra infancia también se encuentre en este tipo de peligros, pues yo creo que es una llamada de atención muy fuerte para que se pongan a hacer su trabajo”, indicó el prefecto de disciplina.
Es una pérdida sensible, es un hecho muy lamentable “y yo creo que no solo corresponde a las autoridades y a todos los ciudadanos alzar la voz, para que poco a poco esto se vaya erradicando y a las familias generar más conciencia social”, destacó al concluir.
