Cuando la señora María Luisa experimentó la dura vivencia de tener a un familiar en el hospital durante fin de semana y después de que un domingo unas personas llegaran a ofrecerle café y pan, al igual que a otros familiares de los pacientes internados y enfermos que esperaban consulta, ella prometió hacer lo mismo por 1 año, ya lleva 4 años y medio realizando esta acción altruista una vez al mes.
“Yo viví por un accidente que un familiar estuviera aquí, era domingo y no había nada cerca para comer o tomar y uno no se quiere mover por cualquier informe que den, así que como manda por la recuperación de mi familiar, prometí hacer lo mismo que las personas que se acercaron aquel domingo, dije que por un año y me di cuenta que no era suficiente, ya llevo casi 4 años y medio viniendo aquí” relató la señora María Luisa.
Café, pan y tortas es lo que ofrece la señora a las personas que se encuentran en el área de espera del Hospital General de Salamanca, su labor altruista la realiza una vez al mes, ya que dice entiende que muchas veces la necesidad básica de la alimentación de los familiares de los pacientes queda en un segundo plano debido a la mortificación por la persona querida que se encuentra hospitalizada, en quienes los familiares enfocan sus energías.
La señora Isabel, familiar de un paciente internado, consideró como “bendita” las acciones emprendidas por la señora María Luisa, quien aseguró que la sociedad ocupa de más personas que empaticen con quienes viven un momento complicado o difícil en la vida.