EL ESTADO DE LA MUERTE
La reciente ola de homicidios y hechos vinculados con el crimen organizado que han generado desestabilidad en los municipios del corredor industrial, han convertido a Guanajuato en estado vulnerable y ha sido exhibido a nivel internacional como la entidad con más asesinatos dolosos y culposos.
Tan sólo en los asesinatos tanto Irapuato y Salamanca se han convertido en zona metropolitana para los sicarios que diariamente atacan o abandonan cadáveres, cuerpos descuartizados.
Tan sólo el fin de semana, en Irapuato se vivió psicosis a consecuencia del abandono de supuestas cabezas de cerdo en hieleras en tres distintos puntos de la ciudad, también influyó el ataque a policías y en Salamanca la festividad a San Judas Tadeo fue manchada por el asesinato de dos personas.
En septiembre, Guanajuato ocupó el primer lugar a nivel nacional con el mayor número de ejecuciones, en total 159; rebasó a estados como Veracruz y Guerrero y en lo que va del 2017 ocupa el tercer lugar en ejecuciones.
La estrategia de seguridad no ha servido para contener a la dleincuencia, la millonaria inversión en el programa Escudo es claro reflejo del desvío de recursos del Gobierno del Estado que ha demostrado no tener el mínimo interés para combatir la delincuencia.
LA EXTINTA PGR
La delegación de la Procuraduría General de la República (PGR) es una instancia fantasma. La PGR no ha hecho en los últimos años para investigar y procesar a los detenidos vinculados con delitos federales.
La única actividad a la que se dedica la casi desaparecida procuraduría es a decomisar máquinas tragamonedas, anteriormente al menos eran discos apócrifos, ahora ni eso.
Ni estrategia, ni trabajo, ni investigación, es nulo el trabajo de la delegación que al parecer carece de recursos para ejecutar algún trabajo.
ACCIONAR
En los últimos días la pobreza extrema y la desigualdad social se han manifestado de diferentes maneras, en todo los casos con historias verdaderamente lamentables y tristes que han hecho estremecer a más de uno que se considere de corazón duro, sin embargo en medio de las buenas intenciones y el deseo de ayudar, falta todavía ese paso que marca la diferencia entre el querer y el hacer, porque muy pocos son los que marcan esa diferencia para que las buenas intenciones y la ayuda que se necesita, llegue a las personas; y, así como ocurrió en la movilización social que por segunda vez demostraron los mexicanos después de los sismo del 19 de septiembre. A México le urge dejar la pasividad y mostrar más esa actitud y accionar que se necesita para marcar la diferencia.
ALTRUISMO
Los casos de personas que han necesitado de ayuda en medio del olvido y la mendicidad, ha sacado también a relucir la falta de instituciones que brinden ayuda a la población más necesitada, como son los adultos con discapacidad, esas personas que no pueden valerse por sí mismas y que sin embargo no cuentan con familiares que puedan darles la asistencia que necesitan, por lo que surgen varias dudas, una de ellas la ineficacia de un “caraqueado” Sistema DIF, que en estos casos, no sabe ni qué hacer, así como tampoco cuenta con un listado de instituciones con las que se puede apoyar y peor aún que no existe la menor comunicación, ni enlace entre el municipio, Estado y Federación.
Y el último cuestionamiento que surge en torno a la falta de instituciones que brinden asistencia a indigentes con discapacidad, es porqué los gobiernos en todos los niveles, desde el federal hasta el Estado y la Federación, le apuestan total y ampliamente a destinar una juga cantidad de recursos a la entrega de todo tipo de apoyos sociales, como los hoy disputados boilers, despensas, materiales de construcción y hasta pintura; en lugar de crear o apoyar instituciones de asistencia a personas extremadamente pobres que sin poderse mover quedan en la calle, olvidados y a la buena de Dios. ¿Será que éstos últimos no representan suficiente fuerza para el manipuleo de votos para los gobiernos en el poder? “¡Piensa mal y acertarás!”.