La familia del pequeño Jairo quien falleciera en el Hospital General de Salamanca por presunta negligencia médica, ha hecho varias peticiones a la Secretaría de Salud para desistir de la denuncia, entre ellas la baja permanente del personal médico y enfermeras que atendió mal al niño.
Luego del fallecimiento del pequeño de 8 años que presentaba muerte cerebral y que no fue atendido debidamente en el área de pediatría, acusaron los papás, ahora la familia exige que se apliquen varias medidas ante el descuido yo omisión de médicos y enfermeras.
El viernes por la tarde Virginia Juárez y Carlos Sandoval, papás del niño, sostuvieron reunión con representantes de la Secretaría de Salud de Guanajuato quienes reconocieron las irregularidades ocurridas en el trato hacia el pequeño.
Acordaron una reunión programada para el próximo primero de julio en el Hospital General, los papás piden que esté presente el personal que dio seguimiento al caso de Jairo donde deberá aclarar las omisiones y falta de atención hacia el paciente.
Los padres del niño piden hablar con médicos y enfermeras, que la Secretaría de Salud despida a los doctores que no hicieron el trabajo correctamente y suspenda la cédula profesional para que no puedan ejercer; que la dependencia estatal devuelva el dinero que gastaron para que Jairo fuera atendido; y por último, se atienda de manera particular e inicie investigación contra una enfermera que no realizó su labor de manera adecuada.
“Yo no quiero dinero, el dinero no me va a devolver a mi hijo, sólo quiero que me paguen lo que gasté en los estudios para el niño porque ellos se negaron, no quisieron hacerlos”, dijo Carlos Sandoval.
A raíz de que se dio a conocer el caso de Jairo, en redes sociales la familia ha sido amenazada.