La Policía Federal alista el Protocolo de Actuación sobre el uso de la fuerza, con el que se busca establecer normas de capacitación y protección a los derechos humanos durante los operativos que realicen los elementos de seguridad.
En el manual, las autoridades establecen los distintos niveles sobre el uso de la fuerza y definen los casos en los que se puede llamar al orden a través de una conversación sin el uso de la fuerza.
Se definirá cuándo el policía puede emplear las pruebas de control físico y hasta aquellas situaciones en las que sea necesario utilizar tácticas defensivas, además de reducir el uso de armas de fuego, exclusivamente cuando esté en riesgo la vida de un ciudadano o de un elemento de la corporación.
«Se trata de dotar de un marco normativo que de confianza y certeza jurídica a todas y todos los compañeros que en la calle exponen su vida, su integridad física y que en muchas ocasiones no tenían un mecanismo para defender su actuación en circunstancias de riesgo”, dijo el comisionado General de la Policía Federal, Manelich Castilla Craviotto.
Las áreas jurídicas definirán los equipos y accesorios permitidos en el actuar policial, además de aquellos casos donde sea indispensable documentar las actuaciones con un respaldo en video y fotografía.
Según la Policía Federal, el manual fue elaborado luego de que la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) realizará señalamientos por el actuar de los policías federales.
Con información del Excelsior