De acuerdo con el fondo para la infancia de la ONU (Unicef), en el mundo, tres de cada cuatro niños de entre 2 a 4 años de edad son, víctimas de algún tipo de disciplina violenta por parte de sus tutores.
Sólo 60 países han adoptado una legislación que prohíbe totalmente el castigo corporal contra los niños en el hogar, lo que deja a más de 600 millones de menores sin protección jurídica ante este tipo de castigos.
Unicef sostiene que la violencia que viven los niños y adolescentes en México es generalizada, las agresiones las encuentran en sus casas, las escuelas y en la calle.
De acuerdo con la Red por los Derechos de la Infancia, Redim, el 40 por ciento de la población consultada cree que los menores no tienen derechos, “hemos detectado que piensan en los niños como objeto de propiedad de las familias y no como seres que tienen derechos”.
Muchos padres maltratan a sus hijos física o psicológicamente por no saber cómo educarlos; otros llegan a este extremo por problemas con el alcohol o las drogas. Lo cierto es que muchas personas llevan recuerdos que las marcan para toda la vida, marcas hechas por quienes les dieron la vida.
