Por: Michelle Rico.
Quizás en la actualidad nuestra ciudad no es la que esperamos que fuera, por los miles de sucesos malos que han estado pasando en ella, pero a pesar de eso es la ciudad que nos vio nacer a muchos de nosotros y por ello sería importante recordad como comenzó este lugar llamado hogar.
Las primeras personas en habitar este lugar fueron los indios otomíes quienes le otorgaron el nombre de “Xidoo” (lugar de tepetates) sus actividades principales eran el cultivo de maíz y la cría de animales.
Pero después de la conquista española, y a consecuencia del crecimiento de la población, el 01 de 1603 fue fundada y nombrada Villa de Salamanca por el virrey Gaspar de Zúñiga y Acevedo, quinto conde de Monterrey quien era originario de la española Salamanca, así que por eso también se le dio el nombre de Salamanca.
El día de su fundación se construyeron calles y se nombraron autoridades.
Pero no fue hasta el año 1895 que se concedió por decreto la categoría de ciudad.
Muchos años más tarde, en 1950, se inauguró la refinería que hoy todos conocemos y que en ese entonces fue un pilar de la economía local.
Sin duda nuestra ciudad tiene mucha historia más, la cual cada día debemos recordar y luchar como nuestros antepasados lo hacían para que vuelva a ser ese lugar tranquilo y en potencia para que cada uno de nosotros y las nuevas generaciones estén orgullosos del lugar en el que nacieron y no olviden sus orígenes.