LEÓN, GUANAJUATO

El talento artístico que plasman jóvenes con síndrome de Down es material de exportación.

La Asociación Leonesa de Adaptación al Down (ALAD) creó un taller productivo encaminado a la auto sustentabilidad.

«Ser objetivo a corto plazo es lograr que este taller sea auto sustentable y que logre un impacto social, fuerte, no sólo en nuestra sociedad, en nuestro país, en nuestro continente y en el mundo”, manifestó Alberto Paniagua, director de ALAD.

Sillas, mesas y artículos de decoración son diseñados con mandalas, en donde la imaginación y el colorido dan forma a cada creación.

«Sí, ya enviamos sillas a Barcelona. Tenemos amigos desde Barcelona que nos apoyan. No es un proyecto de compra y venta, no somos una empresa, somos una asociación civil que nos mantenemos de donativos”, indicó Paniagua.

Cada vez los pedidos son más grandes.

Estos muebles son muy demandados Europa, Sudamérica y en México.

«Pues de España, de Italia, de Francia, Argentina casi diario son como unas 20 personas”, dijo Gabriela Sánchez, maestra.

Al taller acuden ocho jóvenes, quienes con destreza y pasión van acumulando el talento, que ya es reconocido más allá de las fronteras.

«Yo estoy pintando una cajita de madera para meter dinero”, comentó Juan Pablo Jasso, integrante del taller.

Además de tener una terapia ocupacional, los alumnos disfrutan su estancia en el taller, donde además aprenden otras actividades.

«Me gusta mucho correr y tengo el maestro más guapo, Beto”, dijo Guadalupe Gómez, integrante del taller.

El camino no ha sido fácil ya que los costos de paquetería son muy elevados y ello se convierte en un obstáculo el cual no merma el entusiasmo de los participantes.

Con información del Excelsior