El presidente Andrés Manuel López Obrador arrancó este sábado el plan de “rescate” del sector energético, comenzando por rehabilitar las 60 plantas hidroeléctricas del país con 20 mil millones de pesos adicionales al presupuesto de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) que solicitarán al Congreso de la Unión.
Desde la Presa de Chicoasén, el presidente presentó el Programa Nacional de Energía Eléctrica el cual, dijo, tiene como objetivo central volver a hacer autosuficiente al sector y así dejar de comprar a la iniciativa privada el 50 por ciento de la energía que se consume en todo el país.
«Vamos a modernizar estas plantas y que se frene -esa ya es una instrucción- el desmantelamiento de la CFE, no se va cerrar una sola planta más, se acaba la política de estar cerrando las plantas de generación de energía eléctrica de la Comisión, y también si hay competencia, libre mercado, quienes se encargan de la distribución de energía actúen con rectitud, parejo; no es que de repente no se tribuna en Malpaso, Chicoasén, porque se le está dando más oportunidad a las empresas privadas. No, trato parejo, y que todas las plantas operen a toda su capacidad”, dijo.
López Obrador precisó que el sector energético priorizará “generar la energía eléctrica limpia, la que se produce con el agua, que es la que menos contamina y la más barata, ya que la de producción con gas fue un negocio bien maquinado”, a intereses de un sector reducido y no a interés del país. Descartó construir más hidroeléctricas.
«No vamos a poder revertir en el corto plazo este grave problema de la dependencia que se tiene de la compra de la energía eléctrica, no va a ser un asunto a resolverse en el corto plazo, pero ya tenemos que elaborar un plan para ir hacia la autosuficiencia, como era antes”, comentó.
Explicó que echando atrás el “desmantelamiento de la Comisión Federal” producido en 36 años del reciente modelo neoliberalista, y terminando con la corrupción, el Estado volverá a recuperar el control en el sector que se fue perdiendo a partir de 1992, cuando empezaron a dar concesiones a empresas particulares.
Al respecto, la secretaria de Energía, Rocío Nahle, explicó en entrevista que para dicho plan pidieron al Congreso alrededor de “20 mil millones adicionales para lo que es el mantenimiento, pero vamos a esperar que los diputados cuadren y prueben con Hacienda el presupuesto”.
Por otra parte, el director de la CFE, Manuel Bartlett, reiteró que “la situación financiera de la CFE es crítica”, pero ante las dificultades aplicarán un plan de eficiencia, austeridad y contra la corrupción interna.
«Hemos preparado, ciudadano presidente, un plan anticorrupción para asegurar que toda la empresa: sus filiales, sectores de capacitación, etcétera actúen, además de la eficacia con la que trabajan, con absoluta honestidad, con un sistema rígido, con auditorías, con un personal dedicado estrictamente a cuidar la honestidad para que este tema se convierta en realidad”, expuso.
La segunda parte del plan de rescate energético de López Obrador tendrá lugar este domingo, donde colocará la primera piedra la construcción de la refinería en Dos Bocas, Tabasco.