Comerciantes temen que delincuentes les pidan “cuota”, aseguran que no tendrían el porte económico para zanjar un gasto de esta dimensión, no saben si continuar con su negocio o cerrarlo definitivamente; solicitan que el gobierno municipal dé sugerencias en caso de sufrir este detrimento.
Ante los hechos de extorsiones que se han registrado y/o dado a conocer por parte de microempresarios y empresarios salmantinos, otras decenas de comerciantes viven en la disyuntiva de cerrar o continuar con sus negocios.
A través de varios medios, dueños de negocios han expresado no tener la capacidad económica de solventar el pago por el “derecho de piso” e interrumpieron de manera permanente su giro comercial, sin embargo existen otros microempresarios que están en conflicto porque no saben qué rumbo tomar en este contexto; a pesar de tener negocios que no les otorgan ganancias significativas, temen que delincuentes les soliciten un pago porque son actividades comerciales que tienen poca afluencia y no poseen la capacidad económica para solventar un gasto de esa magnitud.
Tal es el caso del señor Alejandro N, quien se acercó a este medio de comunicación con la finalidad de hacer evidente el conflicto por el que está pasando su familia y dadas las circunstancias, busca una respuesta a su dilema.
“Nosotros vamos empezando con este negocio, no tenemos en abundancia, no somos ricos como para pagar por ningún motivo, vivimos al día y prácticamente que apenas nos alcanza para la reinversión, se puede decir que ni siquiera tenemos ganancias todavía, pero la mera verdad ya tenemos miedo, este negocio lo hemos construido poco a poco, usted ve que no es la gran cosa pero no sabemos si dejarlo y arriesgar o cerrarlo, ojalá que la alcaldesa y los otros directores nos pudieran orientar”, señaló en ciudadano.
También, solicitó un acercamiento por parte de los elementos de seguridad que circulan por la ciudad, considerando que con un buen programa se pueden realizar acciones que coadyuven a la protección de quienes están siendo afectados, cree que si se organizan se pueden minimizar los casos de extorsiones y asegura que, si se quieren hacer las cosas, se puede lograr algún progreso.
“(…) Sí, creo que si llegan más elementos se pueden poner varias patrullas para que estén de manera permanente en una colonia, que no dejen de dar rondines, no sé, yo no soy experto en seguridad pero creo que si se organiza de alguna manera podría ayudar a que se reduzcan los casos de extorsiones”, refirió.
También consideró que a lo largo y ancho de la ciudad, existen muchos comerciantes que como él, temen ser víctimas y redundó que ante las circunstancias que prevalecen en Salamanca, nadie está tranquilo por lo que discurre que un buen número de personas tienen duda sobre cómo tienen qué actuar ante este tipo de escenarios, por lo cual es menester que las autoridades implementen alguna estrategia que asesore.
De manera extraoficial, se ha dado a conocer que varios negocios han cerrado porque ya fueron víctimas de la delincuencia y por tal motivo han decidido retirarse definitivamente de los diferentes giros comerciales que atienden.
Al respecto, ningún nivel de gobierno ha emitido alguna recomendación y hasta el momento no se tienen estadísticas reales sobre el cierre de negocios por estas causas.