Tras varias discusiones y un receso de casi 2 horas, se aprobó el presupuesto de egresos para el 2020; regidores generaron acuerdos con la alcaldesa Beatriz Hernández para licitar contratos que tiene la administración.
El lunes 31 de diciembre, se llevó a cabo la última sesión de ayuntamiento de Salamanca, donde se sometió a discusión la aprobación del presupuesto de egresos para el ejercicio fiscal 2020.
Sin embargo, la discusión de este primer punto del orden del día, causó polémica entre los integrantes del cabildo luego de que los regidores Armando Alonso Olivares y Víctor Hugo Rueda solicitaran la información de varios contratos sobre la renta de la maquinaria y otros artefactos utilizados principalmente en dependencias de servicios públicos, situación que en primera instancia molestó a la alcaldesa Beatriz Hernández, señalando que esos contratos se encuentran exhibidos en la página de transparencia del municipio.
Beatriz Hernández, dijo que las peticiones de los regidores no eran más que pretextos para no aprobar el presupuesto [inserto1,video1,min:00:50-01:40] no obstante, al realizar la primera votación, no se logró la aprobación del presupuesto de egresos 2020 tras 7 votos en contra de integrantes del G8.
Sin embargo, la no aprobación del presupuesto, generó una acalorada discusión entre los regidores Armando Alonso y Víctor Hugo Rueda con la Alcaldesa, los que provocó la salida de estos dos integrantes, lo que derivaría posteriormente en un receso de 2 horas.
Dicho receso, consistió en una mesa de trabajo con los integrantes del cabildo presentes, para generar acuerdos y retomar la discusión del presupuesto de egresos, por lo que tras analizarse nuevamente, se llegó al final a la aprobación luego de acordarse transparentar los convenios que la administración tiene y los licite.
En el presupuesto del 2020, se proyectaba principalmente el pago de aumentos salariales para empleados de servicios públicos, la entrega de fondos para las diferentes comisiones de los regidores, proyectos de obra pública