Se complica salud de niña de 13 años embarazada en Veracruz.
Una menor de 13 años de edad y con 32 semanas de embarazo fue trasladada vía aérea por la Secretaría de Salud al hospital Valentín Gómez Farías, ubicado en Coatzacoalcos, Veracruz.
La niña presentaba complicaciones médicas tales como eclampsia, convulsiones y deterioro neurológico, generado por la desnutrición, ausencia de control prenatal y su corta edad para estar embarazada.
Por estas razones tuvo que ser sometida a una intervención quirúrgica para adelantar el nacimiento del bebé, que fue trasladado a la Unidad de cuidados intensivos neonatales.
Veracruz es uno de los estados en donde se privilegia “la vida” de acuerdo con una adición hecha a la Constitución del estado en 2016, firmada por el entonces gobernador Javier Duarte de Ochoa, los diputados y líderes de diversas religiones.
El estado garantizará el derecho a la vida del ser humano y su seguridad humana, desde el momento de la concepción hasta la muerte natural, como valor primordial que sustenta el ejercicio de los demás derechos, salvo las excepciones previstas en las leyes”, señala la Constitución.
Aracely González Saavedra, directora de Equifonía, una asociación civil que trabaja por la ciudadanía, autonomía y libertad de las mujeres, dijo que el caso de la niña de 13 años embarazada muestra la realidad del embarazo adolescente que se vive en el estado de Veracruz, en donde el 8 por ciento de 26 mil adolescentes embarazadas son menores de 14 años, de acuerdo con la Secretaría de Salud en datos dados a conocer en 2017.
Es importante que se haya garantizado un traslado inmediato de la niña una vez que se presentaron las complicaciones, que se haya invertido recurso para garantizar su atención dada las condiciones de gravedad, sin embargo, creemos importante señalar que el que la niña haya llegado a ese punto, que haya presentado las convulsiones, que haya evolucionado hasta ese punto, su condición nos indica que la atención fue tardía”, afirmó.
Expresó que expertos en salud materna que consultaron, les señalaron que al presentar estos síntomas, su bebé tiene hasta un 80 por ciento de probabilidades de perder la vida y en caso de sobrevivir tendría un 94 por ciento de probabilidades de tener secuelas neurológicas.
La niña al tener esta cantidad de convulsiones tiene de entrada un 70 por ciento de probabilidades de perder la vida y que en caso de que sobreviva presentará secuelas considerables, esto también, por lo tanto, nos remite a lo que implica para su familia, es una tragedia en todos los sentidos”, comentó.
La activista consideró que en embarazos infantiles se debe de responder de manera inmediata, tratándolo como posiblemente caso de maltrato o violación y de inmediato proponer la interrupción del embarazo.
La Organización Mundial de la Salud indica que las adolescentes menores de 16 años corren un riesgo de defunción materna cuatro veces más alto que las mujeres de 20 a 30 años.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) 2017 muestran que tres cuartas partes, el 73.3 por ciento de los 48 millones de mujeres de 15 años y más, han sido madres.
El 41.1 por ciento de las madres de 15 años y más no cuenta con educación básica y según datos de la Encuesta Intercensal, 7.8 por ciento de las adolescentes de 12 a 19 ya eran madres.
Excélsior / Fuente