La subdirectora de la Escuela Secundaria Técnica #38 de Salamanca aclaró que en la institución no se condiciona la entrega de libros y mucho menos la inscripción.
Luego de que se reportó que en dicha institución y en otras del nivel básico se está condicionando la entrega de los libros de texto gratuitos, directivos y docentes contactaron a este medio para externar que es reprobable que se efectúen actos de difamación toda vez que la institución nunca ha pretendido relegar este beneficio a ningún estudiante ni padre de familia.
A decir de la portavoz institucional y subdirectora académica María del Rosario Vázquez Hernández , todo se trató de un posible mal entendido pues aunque efectivamente se solicitó cumplir con un proceso de inscripción, nunca se obstaculizó el beneficio y mucho menos se exigió la llamada aportación voluntaria.
«En ningún momento nosotros manejamos la cuota y la aportación voluntaria es un acuerdo que surge entre los mismos padres que tienen que pagar varios servicios, por ejemplo ahorita llegó un recibo del agua de más de 7 mil pesos (…) jamás se manejó una condición», señaló docente.
La maestra expresó que la confusión pudo estar en que los padres de familia pensaron que uno de los requisitos para completar el proceso de inscripción era el pago forzoso de la aportación voluntaria, sin embargo, nunca fue un pedimento ni algo que se haya señalado como obligatorio y únicamente se les explicó que el día de la entrega de libros iban a estar los padres de familia de la mesa directiva por si algunos gustaban entregar el recibo, además detalló que se ha estado comunicando que no existirá impedimento para que oportunamente se entreguen los libros.
No obstante, el proceso de inscripción solamente consistió en el llenado de un formulario para los alumnos de nuevo ingreso, de ahí se les asignó un grado y un grupo, una vez completado tal como lo instruyeron las autoridades federales, estatales y locales, se procedió a realizar las inscripciones vía correo electrónico; cabe mencionar que se llevó a cabo de esta manera por la contingencia que permanece.
La subdirectora Vázquez Hernández destacó que la secundaria cuenta con una población de 36 grupos y dijo que no era sencillo suministrar una logística para más de mil 100 alumnos y una demanda que está creciendo, por ello se organizaron de tal manera.
La maestra también explicó que los padres de familia cuestionaron si se daría alguna aportación y ante las dudas existió una reunión ente los miembros del Comité de Padres de Familia en la que se acordó una aportación que es independiente al contexto y el desarrollo académico pues muchos papás están conscientes de las necesidades que se tienen en la institución, pero ese es un tema independiente que nada se relaciona con el tema de la entrega de textos gratuitos.
«Jamás hay una condición que no sea completar el proceso de inscripción como ya le expliqué con el formato, y una vez que lo tuvieran recibieron un aviso que decía <su proceso de solicitud ha sido aceptado, puede pasar al siguiente paso que es recoger los libros>, JAMÁS, condicionan pago alguno, (…) tenemos los documentos, tenemos los comunicados y se los vamos a compartir», aseveró subdirectora.
Por último, la profesora reconoció que la cuota no es obligatoria pero sí es muy necesaria puesto que las escuelas subsisten gracias a las donaciones que otorgan las familias pues el Gobierno se encarga de solventar las nóminas mas no de los pagos de servicios, el mantenimiento ni otras necesidades del plantel.
«Nosotros no tenemos que condicionar nada, sí, la cuota no es obligatoria pero sí es muy necesaria, las escuelas viven de eso», puntualizó docente.
