Deuda Privada a Deuda Pública Medioambiental y de Salud .
Por: Alberto De la Torre Gleason*
En la Parte 1 Antecedentes [7], se describen algunos sucesos importantes en la historia de la empresa Tekchem; luego en la Parte 2 Riesgos y toxicidad [8], tratamos las generalidades de riesgo ambiental y toxicidad de las sustancias manejadas por la empresa (plaguicidas). En esta ocasión describiremos el accidente [9], evento que marca el punto de quiebre de la empresa:
El accidente
El 12 de septiembre del 2000, a las 18:53 horas, ocurrió un accidente en la planta de Tekchem. Según los vecinos, aproximadamente media hora después de que sonó la alarma, se levantó una gran nube que, al inicio, cubrió unos 5 km. Debido a que en ese momento el viento corría de norte a sur, esta nube llegó 22 km hacia el sur, hasta Valle de Santiago.
Una media hora después hubo una segunda explosión; como la dirección del viento había cambiado y, en ese momento, era de oriente a poniente, la nube pasó por el centro de Salamanca y llegó a Irapuato, unos 20 km hacia el poniente, por lo que, a las 21 horas “el olor era insoportable» en esa población.
Debido al cambio de dirección del viento, la segunda explosión afectó una parte diferente de Salamanca, incluyendo el centro de la ciudad, las comunidades rurales que se encuentran hacia el poniente y los sitios hacia los que se había empezado a llevar a los evacuados.
Los vecinos afirman que la alarma ya había sonado como a las 16 horas y que, en los días previos, se había oído varias veces sin que se conociera la causa. Poco después del accidente, el director de Tekchem, Ignacio Rivero Darancou, afirmó que “…se pensó inicialmente que se trataba de un derrame simple; sin embargo, alrededor de las siete de la noche fuimos notificados de la segunda explosión de malatión [10] …”, lo que parecería confirmar la versión de los vecinos y que, en realidad, se trató de tres explosiones, la primera, cerca de las 16 horas, la segunda, poco antes de las 19 horas y, la última, a las 19:30.
La empresa no permitió el paso a los servicios de emergencia –bomberos, Cruz Roja local y Protección civil municipal- ni activó el Sistema de Ayuda Mutua Industrial, sino hasta después de la tercera explosión, a las 19:30 horas, cuando su brigada de emergencia había fracasado en controlar la fuga. La XVI Zona Militar puso en operación el Plan DN-III aproximadamente a las 20:00 horas y acordonó el lugar con apoyo de los bomberos.
Por la gravedad del accidente, además del ejército y los grupos locales, en su control tuvieron que participar los cuerpos de seguridad del estado, los grupos de emergencia de otros once municipios, el sistema de urgencias del estado, la Policía Federal Preventiva y Protección Civil de Irapuato.
Aunque en el Boletín emitido por el municipio se dijo que el control de la emergencia había sido coordinado por el Presidente Municipal, Samuel Alcocer Flores, en vista de las discrepancias en los informes se puede suponer que esta coordinación no fue adecuada.
Las autoridades iniciaron la evacuación después de que “se asentaron” las emanaciones de la segunda nube; sin embargo, debido al fuerte y desagradable olor que se sintió a partir de la primera explosión –“a ajos podridos”-, desde un principio los vecinos de la planta habían empezado a salir por iniciativa propia. Desde las 19:30, empezaron a apoyar el desalojo los vehículos de servicio colectivo y los taxis.
La evacuación se hizo en un área de 3 km alrededor de Tekchem y fue coordinada por el Ejército; los desalojados fueron llevados hacia tres albergues en el poniente de la ciudad, por lo que, cuando cambió la dirección del viento, quedaron expuestos.
Conforme a la autoridad municipal, la emergencia se consideró controlada a las 01:55 horas del 13 de septiembre. Por empleados de la planta se supo que, en realidad, la fuga no fue controlada, sino que continuó hasta que se vació totalmente el reactor afectado.
A partir de la 01:30 del 13 de septiembre, antes de que la emergencia se declarara controlada, las autoridades empezaron a regresar a los evacuados a sus casas, con la recomendación de que las ventilaran, lavaran los alimentos, lavaran su ropa y se dieran un baño “normal”. Los vecinos afirmaron que el olor fue muy fuerte unos dos días, a pesar de que ventilaron bien sus casas e, inclusive, lavaron las paredes.
Los afectados
Se desconoce el número oficial de expuestos y, desde luego, el número real. En ese año, en la cabecera municipal de Salamanca vivían unas 200,000 personas; conforme a la superficie cubierta por las dos nubes, en la ciudad deben haber estado expuestas por lo menos la mitad, o sea, unas 100,000 personas, a las que deben sumarse los habitantes de las comunidades rurales situadas al sur y poniente de Salamanca.
Los vecinos calcularon que alrededor de la planta vivían aproximadamente 1,500 personas, aunque, según las autoridades, eran sólo unas 400. Las colonias afectadas directamente fueron 120; de ellas, las más cercanas a la planta y, por lo tanto, las más afectadas, fueron 21 por la primera nube y 3 de ellas, más otras 17, por la segunda.
También fueron afectados el centro de la ciudad y las comunidades rurales hacia el sur y el poniente de Salamanca. En el momento de la explosión, en las instalaciones de Tekchem estaban unos 100 trabajadores, quienes deben haber estado más expuestos que los vecinos.
Conforme a los informes iniciales de protección civil municipal, los evacuados fueron 60,000; después, las autoridades locales afirmaron que sólo fueron evacuadas 800 personas. El número oficial definitivo de evacuados fue 1,100. Los vecinos calculan que aproximadamente otras 15,000 personas salieron hacia el norte de la ciudad y lugares cercanos por propia iniciativa, mientras que el diputado local, Ricardo González, afirmó que los evacuados fueron entre 60,000 y 80,000, lo que equivale a entre 15 y 20 % de la población del municipio, que él calculó en 400,000.
Los datos sobre los intoxicados y hospitalizados proceden de distintos periódicos nacionales y locales y no concuerdan entre sí, ni con la versión oficial. Según las distintas fuentes, los intoxicados fluctuaron entre 200 y 6,000, los hospitalizados entre ninguno y 800, los graves entre ninguno y 37. Según el Boletín de Epidemiología de la Secretaría de Salud federal, en las semanas 36 y 37 hubo entre 1 y 3 intoxicados “en todo el estado”. Según el Boletín de Tekchem del 13 de septiembre a la Bolsa Mexicana de Valores, “no hubo ningún intoxicado”, aunque después, su vocero, Pablo Ortiz, afirmó que hubo 110 hospitalizados, pero que ninguno fue grave. No hay datos sobre los afectados en las comunidades rurales ni en los municipios de Irapuato y Valle de Santiago.
Los intoxicados fueron atendidos en varios hospitales de la ciudad e, inclusive, uno en León. Muchos acudieron a clínicas y médicos particulares en Salamanca y otras ciudades cercanas. Según las declaraciones de los vecinos, sólo recibieron tratamiento de apoyo.
Continuará…
Salamanca, Gto. 28 de junio del 2020.
*Miembro del Observatorio Ambiental Ciudadano Biósfera.
[7] Consulta en Línea: https://www.somosmass99.com.mx/de-deuda-privada-a-deuda-publica-medioambiental-y-de-salud-i/ , https://salmantino.mx/2020-biosfera-tekchem-a-12-anos-de-abandono-parte-1-antecedentes/
[8] Consulta en Línea: https://www.somosmass99.com.mx/tekchem-de-deuda-privada-a-deuda-publica-medioambiental-y-de-salud-ii/ , https://salmantino.mx/2020-biosfera-64/
[9] Bibliografía: Jacott y Albert, México Tóxico: Emergencias químicas, Primera edición 2015, Editorial Siglo XXI.
[10] Compuesto químico organofosforado, pesticida -, utilizado casi exclusivamente como insecticida, formado por éteres del ácido fosfórico. Consulta en Línea: https://www.ecured.cu/Malathion