Una negligencia directiva ha puesto en riesgo la salud de muchos trabajadores de CMAPAS, por el temor a replesalias y porque en realidad nadie protegería a los colaboradores en caso de un despido por hacer uso de su libertad de expresión, los trabajadores piden anonimato pero hablan tratando de salvaguardar el bienestar de los suyos y de quienes todos los días salen a la calle con el temor de llegar a casa y llevar el virus.
Mientras los de más alto rango se despreocupan por la clase obrera, crecen los contagios en el Comité de Agua Potable y tal parece que no importa el latente riesgo cotidiano pues nada se ha hecho para mermar el contagio
A pesar de que en el municipio de Salamanca se han prohibido ipso facto los tumultos, concentraciones, reuniones en el contexto social, deportivo, cultural, médico, económico y hasta familiar, tal parece que el medio laboral es intocable pues en CMAPAS no se toma ninguna medida que proteja la salud de los empleados y a decir de los afectados parece más importante el trabajo que la salud ya que la clase obrera labora todos los días en grupos y aunque muchos se mueven con las medidas de sanidad, no ha sido suficiente porque ya están contagiados o bien, tienen sospecha y están en espera de resultados.
Ante este panorama, los propios empleados expresan una realidad preocupante que sin duda está provocando el rápido y colosal crecimiento en los casos de Covid19.
Sin querer un conflicto, los trabajadores piden que el presidente sea empático y ejecute las medidas de salud adecuadas para evitar una propagación mayor.