#NotaEditorial  LA REFINERA

Después de 14 días de haber estado contagiada de Covid-19 la alcaldesa Beatriz Hernández Cruz apareció y no precisamente para hacer lo que le corresponde, es decir, no se le vio trabajando, se le vio haciendo proselitismo con su allegada Antares Vázquez, ambas salieron a las calles de Salamanca a seguir hablando de las «acciones bien hechas» que tanto presumen, pero, acá entre nos, hablamos con comerciantes que visitó quienes explicaron que no se portaron groseros con la alcaldesa pero aseguraron que no les fue nada grata su visita pues aunque trató de convencerlos de que ella es buena gobernante, la ciudadanía sabe la realidad y está enterada de todas las arbitrariedades que ha cometido la munícipe quien cree que los salmantinos la ven con agrado y confianza cuando la realidad es que la mayoría de la población reprueba completamente esta administración que mucho daño nos ha hecho, en fin, que siga con sus sueños guajiros.

Mientras este par de mendaces andaba ‘de gira’ por el mercado Tomasa Esteves, la gente se percató de que no predicaron con el ejemplo pues en varias ocasiones se quitaron el cubrebocas para andar hablando de lo «magníficas» que son y entonces provocaron que los salmantinos las llamaran irresponsables, principalmente a Beatriz a quien le importó poco haberse contagiado pues pronto decidió andar muy campante, quitándose este utensilio y hablándole a la gente, poniéndola en riesgo. Por ello, muchos salmantinos se inconformaron pues aunque esté ya muy sana, es una irresponsabilidad no utilizar cubrebocas.

Por otra parte, trascendió que muchísima gente calificó de mentirosa a la alcaldesa, considerando que su contagio de Covid-19 fue solamente un invento para evadir a la prensa tras las desafortunadas declaraciones que hizo sobre el asesinato de Isra.

Verdad o mentira, lo cierto es que ya nadie confía en la presidenta, ni sus propios trabajadores y se lo ha ganado a pulso.

No se terminan las mermas si hablamos del servicio de emergencias 911. La semana pasada no fue la excepción cuando unos ciudadanos prácticamente le tuvieron que hacer el trabajo a la Policía Municipal al detener a un ratero, la cosa no quedó ahí pues luego de detener al susodicho, varios ciudadanos llamaron a la Policía para que llegara por el detenido, sin embargo, pasó el tiempo y los elementos literalmente ‘ni sus luces’ pues ninguna patrulla llegaba y fue hasta después de una hora, cuando al fin se atendió el reporte.

La ciudadanía que estaba presente de plano tenía razón y es que por eso estamos como estamos, pues se da aviso de los hechos y tiene que pasar un muy buen rato para que hagan caso, ¿así cómo vamos a mejorar? Con el caso omiso y luego tanta dilación, calma, flema, pachorra pues ¿cómo? Por eso suceden tantos hechos delictivos, porque los delincuentes saben del tiempo de respuesta, por eso no avanzamos.

Por otra parte, resalta que ya hay varios hechos en los que la población reacciona y enfrenta a los delincuentes, por un lado se comprende perfectamente el hartazgo y por el otro, es importante resaltar que es peligroso y es que muchas ocasiones hay armas de por medio, entonces, sin duda se exhorta a la población para que tome sus precauciones y no se arriesgue, acuérdense que nada vale más que la vida.

Ya se perfilan los candidatos para la alcaldía de Salamanca, han salido algunos personajes que andan con su ‘labor social’ a todo lo que da, otros ya están en tratos para dar el ‘chapulinazo’, varios más están en proyectos ‘independientes’, otros, no quieren dejar el hueso, también hay quien anda haciendo negocios de compra venta para tener recursos y poder financiar campañas, tal es el caso de Genaro Carreño quien insiste bastante en venderle a Cmapas una de sus propiedades, por cierto a sobreprecio, y es que hay que solventar los gastos que se vienen para patrocinar a su gallo el Doctor José Manuel Cabrera Sixto exrector, al cabo luego ya habrá recursos para recuperar la inversión o ¿de dónde va a sacar el exrector tanto dinero para emprender su campaña solo? Hay que pensar de todo y dudar de todos porque para el poder y el dinero muchos son obstinados y mañosos, así que comiencen las especulaciones, mientras tanto, lo real,  es que ya Juan Carlos González Muro y José Manuel Cabrera Sixto son candidatos  que ya fueron aprobados por el IEEG para luchar por la contienda en Salamanca, o sea para que el municipio siga estando en manos de panistas, por eso, yo les digo que cuidado y como reza el coloquial dicho «A cuidarse del buey más manso apacible porque es el que da la mejor patada, ya ven cómo salió Beatriz…

AGUINALDAZO

A duras penas millones de ciudadanos tienen para comer mientras diputados locales a y federales se van a auto entregar más de 300 mil pesos, esa es una mentada para toda la población que ni siquiera empleo tiene.

Hay un buen número de ciudadanos que se han quedado sin estabilidad económica; a causa de la Covid-19 creció el desempleo y decenas de comerciantes han tenido que cerrar sus negocios, muchísimos salmantinos viven al día, existe una crisis económica que ha aumentado las deudas familiares y muchos no ven salida.

A pesar de ello, los legisladores se van a llevar un jugoso aguinaldo que es injusto, pues entre tanto sufrimiento, ellos sí van a tener opulencia en sus mesas, mientras cientos de personas no tendrán nada para cenar, eso es sumamente triste, por eso, ojalá que más de alguno de los diputados haga alguna labor altruista y reparta apoyos entre la población vulnerable que vive en vilo porque no ve la luz para salir adelante.

Es inconcebible el nivel de desigualdad que existe en este país, es insensato que mientras un trabajador que labora incluso más que un legislador perciba una cantidad minúscula e indigna y mientras eso ocurre, los funcionarios públicos de alto nivel se llevan cantidades excesivas, desmesuradas, que son verdaderamente un insulto para la población, y más para quienes han sufrido la calamidad de la pandemia y más aún de la inseguridad que ha obligado a muchos a terminar con sus sueños para cuidar su vida ante tanta sangre derramada en las calles.

Es así como otra vez, nos quedamos viendo una escena más de desigualdad, otra escena de iniquidad, privilegio, sinrazón y tropelía.