El avión L-410, que transportaba a paracaidistas, se desplomó en la República Rusa de Tartaristán.
Dieciséis personas murieron este domingo en el accidente de un avión que transportaba a paracaidistas civiles en el centro de Rusia y que se partió en dos por el impacto.
Los hechos sucedieron a las 09:23 h (06:23 GMT) cerca de la ciudad de Menzelinsk, en la República de Tartaristán. El avión se estrelló pasados veinte minutos después del despegue.
«Seis personas fueron rescatadas, 16 no presentaban signos de vida», informó el ministerio de Situaciones de Emergencia ruso, a través de una una aplicación de mensajería.
Avería de motor: El avión se partió en dos por el impacto, según imágenes difundidas por el ministerio de Situaciones de Emergencia. Solo sobrevivieron los seis paracaidistas que iban sentados en la parte trasera y llevaban casco. Todos los supervivientes fueron hospitalizados y uno se encuentra «en estado grave», según la agencia RIA Novosti.
El accidente fue causado por una avería de motor, declaró el dirigente de Tartaristán Rustam Minnikhanov, quien acudió al lugar. «Cuando se hallaban a 70 metros de altitud, los pilotos informaron que un motor de la izquierda había dejado de funcionar y solicitaron un aterrizaje de emergencia», afirmó.
Según Minnikhanov, la tripulación intentó alejarse de las localidades cercanas para el aterrizaje, «pero al parecer la altitud no lo permitió».
-Yaz Arciga Martínez-