Enemigos y obstáculos de la Libertad Sindical
Por: Oscar Alzaga*
El gobierno de Miguel Alemán (1946-1952), y su alianza con la oligarquía nacional y yanqui, orquestó un brutal ataque contra los sindicatos nacionales a través del uso sistemático del ejército y defalsos medios legales para acabar el poderoso sindicalismo cardenista, ataque que la historiografía identifica como el “charrismo” sindical, impuesto desde entonces. La segunda embestida contra el mundo laboral y sindicatos sería mucho peor,organizada por los neoliberales (1982–2018).
En la formación de la CTM (1936–1946) los charros –Fidel Velázquez a la cabeza-, asaltaron la dirección con sindicatos medianos y pequeños y federaciones con datos abultados; en 1937con el apoyo de Lombardo y en 1947 expulsando a comunistas, lombardistas y otros, para imponer en el IV Congreso la línea única del PRI: el charrismo, de 1946 a 1982.
Conocer las luchas obreras, campesinas, indígenas, del magisterio, jornaleros y cooperativistas, entre1933 y 1944, así como las antimperialistas, antifascistas y de solidaridad con otrasluchas del mundo, ¡es uno de los episodios más apasionantes de la Historia! Pero no visto desde las oficinas del poder sino desde abajo, en los lugares del trabajo y, sobre todo, desde su organización y luchas. Casi todos los historiadores sobre el cardenismo se interesan más en las pugnas del poder con Calles que en la lucha de clases en el país; que en la etapa más alta de huelgas de la historia de 1935 a 1938; que en explicar por qué crece la sindicalización de 1934 a 1940 al triple; que en saber por qué los mejores contratos colectivos de la historia surgen en el cardenismo, igual que crecen las cooperativas y el magisterio rural, indígena y urbano, como nunca.
Como tampoco se interesan en estudiar los charrazos contra petroleros en 1947 y 1949, ferrocarrileros (1948), magisterio (1949), mineros (1950 y 1951), telefonistas (1950), cinematografistas y ANDA (1950), textiles (1947 y 1951), azucareros (1948-1952), SME (1942-1952) y otros. A raíz del IV Congreso de la CTM, surge la Central Única de Trabajadores(CUT) integrada por ferroviarios, mineros y petroleros, también destrozada por el gobierno de Miguel Alemán. Entonces inicia la corrupción sindical en gran escala (1946 a 1982), pero sin la venta de los contratos colectivos; sin la venta de sindicatos y menos elapoyo a la formación de sindicatos patronales en el país. Recordemos que hasta 1972 siguió mejorando la Ley Federal del Trabajo (LFT) y en 1976 llegó a su mejor nivel el salario; aunque es cierto que con la reforma de 1970 se pierde el derecho de coalición para emplazar a huelga. Lo más importante de esa etapa sería la intensa lucha sindical de los años 1956-1962 y 1972 a 1985; y, desde luego, las jornadas de politización provocadas por loshechos ocurridos en 1968, 1985 y 1988.
Debemos destacar que en el siglo XX la mayoría de las centrales surgen de luchas, pero pronto pierden su independencia y caen en manos de los gobiernos en turno y la patronal; distinto ha sido con los sindicatos nacionales que por mucho más tiempo han sostenidos luchas de enorme trascendencia y enseñanzas.
En la era neoliberal la presencia y el peso del Estado debilitancomo nunca al sindicalismo frente al empresariado y, en particular,ante la oligarquía nacional y extranjera. La organización patronal pasa al primer plano en todos los ámbitos: político, económico, social, cultural, ideológico y educativo. La privatización de la economía fue a fondo, incluyendo la soberanía y la seguridad nacional con la entrega de hidrocarburos, puertos, playas yfronteras. Siguen de modo subordinado la línea neoliberal del Consenso de Washington, el FMI, etc., en contra de la Constitución, la Revolución y la historia patria, y junto a la corrupción, señaladamente, en los fraudes electorales y en el mundo laboral y sindical.
36 años de destrucción sistemática de la estructura económica laboral y sindical, degradan al extremo las condiciones y relaciones de trabajo y la vida de las familias de las y los trabajadores, la mayoría nacional; degradan la vida de sindicatos, en menor medida de los independientes y democráticos, precisamente los que aún ejercen la libertad sindical.
¿Qué es la Libertad Sindical?
La Libertad Sindical se expresa en varios aspectos: en la independencia de la organización laboral ante gobiernos, empresarios, partidos y otras fuerzas políticas y económicas; también en la independencia ideológica y política, no basta la independencia organizativa si el pensamiento sindical es enajenado y atraído por los intereses ajenos de su clase.
El ejercicio de la Libertad Sindical debe lograr que los sindicatos sean de sus propios integrantes, no de sus dirigentes, menos de los subordinados a patrones, gobiernos y partidos. El mandato sindical debe obedecer la voluntad de la mayoría de sus miembros, para que sea democrático. Condición indispensable para el funcionamiento del sindicato y de la Libertad Sindical.
Debe garantizar la independencia económica del sindicato, depender sólo de los recursos de la organización y sus miembros, no de recursos ajenos a ellos, lo que es fundamental. No permitir la deshonestidad o corrupción de algún miembro y menos de la dirección.
La defensa del contrato colectivo de trabajo (CCT) es tan importante como la del Sindicato, ambos representan los intereses y derechos más altos de las y los trabajadores, ambos se apoyan uno al otro, por ello son indispensables y se complementan: sin un sindicato auténtico no hay un buen CCT y detrás de un buen CCT está una organización fuerte, que en cada revisión salarial o contractual se organiza a fondo.
El estatuto es la ley interna del sindicato para su funcionamiento y organización, debe reglamentar la vida democrática, haciendo que la voluntad de la mayoría se respete tanto en aspectos internos como los externos, que por voto secreto, directo y personal se elija a los dirigentes y que a través del voto secreto se apruebe o no, el convenio de la revisión salarial o contractual. El estatuto sindical debe, a su vez, garantizar la libertad, la independencia y la democracia Sindical.
Fundamentales son la unidad de los miembros y su dirección en las luchas o revisiones del CCT, así como la organización y disciplina de sus miembros y la solidaridad de clase con otras organizaciones hermanas. Entre otros aspectos, aquí solo destacamos los más importantes.
Enemigos y obstáculos de la libertad sindical:
La intervención ajena en la vida del sindicato, sea del patrón o sus empleados de confianza, del Gobierno o sus representantes y/o de los partidos, están prohibidas por la ley nacional y los tratados internacionales, obligatorios en su cumplimiento. Pero los patrones,sus abogados y algunas autoridades son expertos en simular la legalidad.
Los Contratos Colectivos de Protección Patronal (CCPP),denunciados en la OIT, son en esencia contrarios a la libertad sindical por estar firmados a espaldas de los miembros del sindicato y a favor de los intereses patronales, según Arturo Alcalde en 2018, eran el 80% de los firmados por la CTM y la CROC. Extirpar los CCPP es una tarea esencial.
El outsourcing o la subcontratación. La mayoría de los CCPPson hoy una mera simulación, por demás ilegal; autorizada por autoridades corruptas, como la reforma laboral de 2012 del PAN ylos ministros de la Suprema Corte que negaron en 2013 los amparos y suspensiones contra la reforma. La subcontratación llega al colmo de la ilegalidad y es un infierno para las y los trabajadores, empezando por contratar más de 4.5 millones de personas como eventuales, sin derecho a la planta, impidiendo así la sindicalización de ellas y ellos y la libre contratación colectiva. En otras palabras, la subcontratación es enemiga de la libertad sindical.
En los tribunales de trabajo faltan la independencia e imparcialidad para garantizar el acceso a la justicia. En caso de violaciones de derechos ¿a quién acuden los trabajadores para reclamar el cumplimiento de la Ley? No basta reformar la LFT, si se dejan las Juntas de Conciliación y Arbitraje, Federal y estatales,igual que antes. Como ocurrió en 2019: se reformó la LFT, pero se dejan intactos los tribunales laborales: que son las Juntas que hasta hoy tienen más del 95% de los asuntos colectivos e individuales del país. Las Juntas siguen como en la época neoliberal.
Las Juntas no cumplen con la LFT de la Secretaría del Trabajo, del 1 de mayo de 2019, pues siguen sin modificar los CCPP, los outsourcing, los estatutos charros, con autoridades que se formaron en los 36 años neoliberales. Sobre todo porque no se hizo un esfuerzo, como en otras áreas del gobierno, de erradicar la corrupción y el carácter patronal de las Juntas, ni en la mayoría de los sindicatos y las empresas.
El obstáculo más grave es que los sindicatos están en manos de los enemigos de los trabajadores, sean patrones o líderes corruptos, esos que impulsaron los CCPP, formaron los outsourcing, redujeron los salarios al nivel más bajo, los que hundieron a las y los trabajadores –la mayoría nacional– en la pobreza y el despojo de sus derechos. Hoy la sociedad y los trabajadores deben recuperar los sindicatos, porque son indispensables para que la nación transite a la democracia.
*Abogado, miembro de la Asociación Nacional de Abogados Democráticos y la Asociación Latinoamericana de Abogados Laboralistas.