En un giro inesperado de los eventos cotidianos en Celaya, una explosión en la reconocida carnicería SUCAHERSA, ubicada en pleno corazón del centro de la ciudad, ha generado momentos de tensión y una intensa actividad investigativa por parte de las autoridades locales.
El incidente tuvo lugar en el concurrido Boulevard Adolfo López Mateos, casi en la intersección con la calle Ignacio Allende, a escasos metros de la Presidencia Municipal. Un estruendo estremecedor acompañado de llamas envolventes sorprendió a transeúntes y comerciantes, desatando una rápida respuesta de los servicios de emergencia.
El equipo de bomberos, con su base a tan solo dos calles del lugar, logró controlar las llamas en tiempo récord. Mientras tanto, la policía acordonó la zona y los agentes de vialidad cerraron la circulación vehicular en las inmediaciones, creando un escenario que recordaba a escenas cinematográficas.
Las secuelas de la explosión eran evidentes: cortinas de la carnicería dobladas sobre la acera, parte del techo colapsado y refrigeradores dañados esparciendo un caos de cajas por todo el establecimiento. Afortunadamente, y para alivio de la comunidad, Protección Civil descartó la presencia de víctimas.
Sin embargo, la situación podría ser más compleja con el descubrimiento de una camioneta en completo abandono, ubicada a pocos metros del Mercado el Dorado, en la calle Combates de Celaya. Agentes ministeriales y de la Policía Municipal localizaron en su interior presunto armamento y artefactos explosivos, desatando la alarma entre las autoridades.
Las especulaciones apuntan a que este vehículo podría haber participado en un ataque armado previo contra otra sucursal de la Carnicería SUCAHERSA en la avenida Francisco Juárez. La explosión en el Boulevard Adolfo López Mateos, según informaciones no confirmadas, podría haber sido provocada como resultado de estos eventos.
En este escenario, peritos de la Agencia de Investigación Criminal asumieron la tarea de recopilar indicios sobre la explosión para determinar su origen y esclarecer si se trató de un accidente fortuito o de un acto intencionado. Mientras tanto, la comunidad permanece en alerta ante las investigaciones en curso y la incertidumbre que rodea estos sucesos.