Habitantes de Valle de Santiago reconocen la labor del Padre Crispín, comentan que fue un sacerdote «como ya no los hay», siempre despegado de lo material, sirviendo al prójimo y queriendo siempre el progreso para la comunidad feligrés de Valle.
El Padre Crispín Mendoza Paredes nació en el municipio de Apaseo el Grande un 7 de enero de 1944, es el actual rector del templo del Misterio, en el mencionado municipio, mismo que se ha dedicado a llevar la palabra de Dios, apoyar y servir a la sociedad de Valle de Santiago, durante todos estos años se ha ganado el aprecio y cariño de los vallenses.
Durante los casi 13 años que el Padre Crispín tuvo a bien estar al frente de la mencionada Parroquia, tuvo algunos logros, lo que ningún otro sacerdote había logrado, infundir el Espíritu Santo en la Evangelización de las 27 comunidades que pertenecen a esa parroquia así como la incansable labor de querer ver el progreso de la comunidad de San José Parangueo, más conocida como los Mogotes, pues con la coordinación de los delegados, ejidatarios, autoridades municipales, de aquel entonces, y todo el pueblo, durante su gestión se lograron obras en beneficio de los propios habitantes como el drenaje, el asfaltado de la avenida 24 de junio hasta los ranchos vecinos, el jardín principal, la cancha de usos múltiples del campo deportivo, la ampliación de la red eléctrica en los rincones de la comunidad que aún no contaban con el servicio, así como las líneas telefónicas.
Sin duda alguna una el Padre Crispín fue una parte esencial durante más de una década para el desarrollo espiritual y de obra en la comunidad de Los Mogotes, es por eso que la ciudadanía vallense le brinda un agradecimiento y reconocimiento por su noble labor.