Durante una asamblea informativa de la Asociación de Empresarios en León, Ricardo Sheffield fue recibido con un abucheo estruendoso y una fuerte oposición por parte de los asistentes. Los gritos de “¡Fuera Sheffield!” y los silbidos resonaron en el salón del Hotel Real de Minas, mientras el senador intentaba presentar su visión, la cual muchos consideraron desconectada de la realidad empresarial local.

El incidente se produjo en un evento dirigido por Luisa María Alcalde, presidenta de la asociación, quien no perdió la oportunidad de señalar las divisiones internas que afectan a la comunidad empresarial, haciendo un llamado a la unidad para enfrentar los desafíos que se avecinan.

Desde el inicio de su intervención, Sheffield mostró un tono desafiante, pero su intento de presentar propuestas fue rápidamente opacado por el descontento palpable en la sala. Los asistentes, claramente frustrados por su falta de compromiso y la percepción de inacción ante los problemas del sector, no dudaron en manifestar su rechazo.

Pese a los intentos de Sheffield de defender su postura, su discurso fue interrumpido por los abucheos. Muchos consideran que su enfoque no aborda las verdaderas necesidades de los empresarios en un contexto económico desafiante. Al final, su intervención se convirtió en un símbolo de la desconexión que algunos miembros de la comunidad sienten hacia ciertos líderes.

Fue Malú Mícher, empresaria y miembro de la asociación, quien logró restablecer un clima de diálogo al tomar la palabra.

Con un enfoque conciliador, Mícher destacó la importancia de la colaboración entre los empresarios, desviando la atención de las críticas hacia Sheffield y enfocándose en las oportunidades de crecimiento.

En declaraciones posteriores, Alcalde reiteró la necesidad de un liderazgo más comprometido y proactivo, criticando a Sheffield por su falta de conexión con las bases empresariales.

La asamblea concluyó con un claro mensaje de la comunidad empresarial: el cambio es necesario y urgente. La falta de unidad y la desconexión de ciertos líderes como Sheffield son vistas como obstáculos significativos en el camino hacia un desarrollo sostenible y exitoso en Guanajuato.