Hoy se inicia una etapa histórica en el ámbito legislativo del Estado de Guanajuato, dado que el Congreso local contará con la representación de seis institutos políticos. Por primera vez en tres décadas, ningún partido político mantendrá una clara mayoría, situación que contrasta con el dominio del PAN durante los últimos 30 años y del PRI en las décadas anteriores.
A partir de este miércoles, el Congreso del Estado se estructurará en dos corrientes opuestas: por un lado, el PAN y el PRI, quienes han sido actores clave en la política estatal; y, por otro lado, Morena, acompañado de sus aliados, el PT y el PVEM. Además, dos diputados de Movimiento Ciudadano adoptarán una postura que se definirá en función de cada circunstancia, lo que podría influir en la dinámica legislativa.
El panista Rolando Alcántar Rojas, quien asumirá la presidencia de la Mesa Directiva en el primer periodo ordinario de sesiones, reconoce que se avecinan meses complejos para los grupos parlamentarios en un país que enfrenta una creciente polarización política. Este contexto plantea retos significativos en la búsqueda de consensos y en la elaboración de políticas efectivas.
Alcántar Rojas recordó que hay varias iniciativas relevantes en la agenda, entre las que destacan las relacionadas con los organismos autónomos y la propuesta de eliminar las elecciones consecutivas en municipios y diputaciones. Estas iniciativas podrían reformar la manera en que se desarrollan los procesos electorales y la estructura del gobierno local.
Asimismo, destacó que una de las prioridades de esta nueva legislatura será abordar el tema de la seguridad. En este sentido, aseguró que corresponde al Congreso del Estado proporcionar las herramientas necesarias para enfrentar esta problemática y trabajar en colaboración con los otros poderes, a fin de garantizar resultados contundentes y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
Fotografía: Roberto López
