El frente frío número uno, ubicado en el Golfo de México, la masa de aire que lo impulsa, la onda tropical número 21, entre otros fenómenos, han dejado en las últimas horas desbordamientos de ríos y dos muertos en Veracruz.
El viento del norte que alcanza rachas de más de 100 kilómetros por hora, además de intensas lluvias, golpean no solo la zona costera del Golfo de México, sino amplias regiones montañosas que resienten los efectos.
Hasta ahora se reporta una docena de municipios con algún tipo de afectación, desde caída de árboles, casas sin techo y anuncios espectaculares derribados por las ráfagas de viento, así como inundaciones en viviendas.
En el municipio de Moloacán, en la región sur de Veracruz, tres ocupantes de un vehículo intentaron cruzar el arroyo Los Caimanes, sin embargo fueron arrastrados por la corriente de agua: dos de ellos murieron y un tercero logró salvarse.
Además, el río Aguadulcita se desbordó inundando cerca de 200 viviendas y generando cortes de energía eléctrica en el municipio de Agua Dulce, donde el Ejército mexicano activó el Plan DN-III de ayuda a la población civil.
En Coatzacoalcos, el viento provocó que encallara la barcaza de fondo plano ‘Tog Mor’, una embarcación dedicada al tendido de tuberías en aguas poco profundas.
La Secretaría de Protección Civil del Gobierno de Veracruz emitió una alerta por la alta probabilidad de que la crecida de ríos y arroyos continúe, al igual que inundaciones, encharcamientos, deslaves, deslizamientos de tierra y derrumbes, destechamiento de casas o caída de árboles.