Estacionarse en doble fila, manejar a exceso de velocidad y el uso constante del claxon son problemas cotidianos alrededor de escuelas en Salamanca. Tanto directivos como padres de familia manifiestan su inquietud por los riesgos de tránsito que afectan a estudiantes en las zonas escolares.
Entre los incidentes más frecuentes destaca el estacionamiento en doble fila. Algunos padres, sin prever el caos vial que generan, ocupan esta posición sin considerar que los motociclistas y otros vehículos deben maniobrar en espacios estrechos, elevando el riesgo de accidentes cuando alguien abre una puerta sin mirar.
Aparte de los problemas de tráfico, la seguridad de niños y adolescentes es la mayor preocupación. En horas de entrada y salida, la alta presencia de vehículos y peatones reduce la visibilidad y aumenta la posibilidad de percances graves. La prisa por salir del embotellamiento agrava la situación, incrementando los riesgos.
Además de la doble fila, otros actos imprudentes como el exceso de velocidad, la falta de altos totales y la omisión de los topes son prácticas comunes. Los padres subrayan que en zonas escolares se debe respetar el límite de velocidad de 20 km/h, aunque muchos conductores lo ignoran.
Padres y tutores insisten en que es necesaria una mayor coordinación con elementos de movilidad y operativos que realmente prevengan estos problemas. Sugieren imponer sanciones más severas a los conductores que infringen las normas y resaltan la importancia de una mayor conciencia ciudadana, alentando a estacionarse en áreas designadas y recoger a los niños caminando cuando sea posible.