El Gobierno de México ha hecho oficial la transformación de la Secretaría de la Función Pública (SFP) en la nueva Secretaría Anticorrupción y de Buen Gobierno, como parte de un esfuerzo por erradicar la corrupción en el país y cumplir con la voluntad del pueblo mexicano.
La Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo subrayó que el objetivo de esta nueva dependencia es cerrar la puerta a la corrupción de forma definitiva y garantizar un gobierno más íntegro, eficiente y cercano a la ciudadanía. “La Secretaría Anticorrupción se encargará de vigilar que no haya actos de colusión y, en caso de que ocurran, garantizar que se actúe de manera contundente”, afirmó la secretaria Raquel Buenrostro durante la conferencia matutina.
La funcionaria destacó que los resultados del sexenio del expresidente Andrés Manuel López Obrador han sido significativos, incluyendo la separación entre el poder político y económico, la entrega directa de Programas para el Bienestar, y la eliminación de la condonación de impuestos. Estos esfuerzos han contribuido a una reducción del 11.2% en los actos de corrupción y un descenso de ocho puntos porcentuales en la percepción de este problema entre la población.
La nueva Secretaría se enfocará en un modelo preventivo y transversal que abarcará todas las dependencias del gobierno. Para lograrlo, se implementarán diez pilares fundamentales, que incluyen:
1.Dignificar la carrera del servicio público mediante la formación en integridad.
2.Acompañamiento preventivo a las instituciones para blindar programas prioritarios.
3.Modernizar la Administración Pública Federal a través de la digitalización.
4.Consolidar compras públicas transparentes a precios justos.
5.Fomentar la transparencia proactiva.
6.Involucrar a la sociedad y al sector privado en el combate a la corrupción.
7.Enfocar los Órganos Internos de Control en áreas de mayor impacto.
8.Fortalecer la cultura de la denuncia.
9.Realizar investigaciones que desincentiven la corrupción.
10.Combatir la impunidad, haciendo que violar la ley sea más costoso que cumplirla.
En sus primeros 100 días, la Secretaría Anticorrupción y de Buen Gobierno buscará reestructurar la Administración Pública en colaboración con la Consejería Jurídica y la subsecretaría de egresos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, y acompañar proyectos estratégicos como el Tren Maya, así como iniciativas en el sector salud y seguridad alimentaria.
Con la creación de esta nueva dependencia, el Gobierno de México inicia una nueva era de transparencia, donde se busca reformar la Ley General de Transparencia y garantizar que la Secretaría no sea juez y parte en los procesos de fiscalización.
“Nuestro compromiso es claro: cerrar la puerta a la corrupción y combatir la impunidad, todo en un marco de transparencia que permita al pueblo evaluar el desempeño del gobierno”, concluyó Buenrostro.
En la misma conferencia, la subsecretaria de Educación Básica, Noemí Juárez Pérez, presentó la sección “Mujeres en la Historia”, dedicada a conmemorar la reforma del artículo 34 de la Constitución Política en 1953, que reconoció el derecho de las mujeres mexicanas a votar y ser votadas.